_
_
_
_

Los ministros de Economía de la UE aprueban la extensión del IVA reducido en los servicios

Tras años de negociación.- Afecta a las actividades de asistencia a domicilio, limpieza de cristales o reparación de bicicletas.- También se beneficiarán los servicios de restauración y la construcción y reparación de viviendas

Los ministros de Economía de la Unión Europea han aprobado este martes, tras varios años de debate, extender la aplicación del tipo reducido del IVA (7% en el caso de España) en los servicios prestados localmente y que requieren mucha mano de obra, como asistencia a domicilio, limpieza de cristales o reparación de bicicletas. Además, autorizaron a Francia a aplicar el IVA reducido a los restaurantes, una reivindicación que el Gobierno de París venía presentando desde 2002. También se beneficiarán de los tipos reducidos los servicios de restauración y el suministro, construcción, renovación, reformas y reparaciones de viviendas.

El acuerdo fue posible tras vencer las reticencias de países como Alemania o Dinamarca, que se oponían a la medida escudándose, entre otras razones, en su impacto presupuestario. Las decisiones de política fiscal exigen unanimidad. En el tramo final de las negociaciones, Portugal logró introducir en la lista de servicios que podrán beneficiarse del IVA reducido los peajes de los puentes.

Más información
La convergencia con la zona euro se detiene tras 13 años de avances
La UE respalda que se dupliquen los recursos del FMI
Las cajas prevén una caída del PIB del 3% en 2009 y abogan por subir los impuestos

La lista final de servicios a los que se podrá aplicar el IVA reducido incluye pequeños servicios de reparación de bicicletas, calzado y artículos de cuero, prendas de vestir y ropa blanca; limpieza de cristales y limpieza de viviendas particulares; servicios de asistencia a domicilio, como la ayuda doméstica, el cuidado de niños y la ayuda a los ancianos, enfermos o discapacitados; y peluquería.

Duplicar los fondos del FMI

Los ministros de Economía y Finanzas europeos han acordado hoy la propuesta con la que la UE acudirá a la cumbre del G-20 en Londres y que apuesta por duplicar los recursos anticrisis del FMI hasta los 400.000 millones de euros (medio billón de euros). Japón ya propuso en la última reunión del G-7 en Roma aumentar su aportación al FMI unos 100.000 millones de dólares. Los 150.000 restantes deberían ser aportados por Europa, EE UU y los países emergentes. Los países europeos, especialmente los que tienen superávit, estarían dispuestos a aportar entre 60.000 y 80.000 millones de euros (75.000 y 100.000 millones de dólares), según fuentes comunitarias.

La iniciativa ya obtuvo el respaldo de los mandatarios europeos reunidos en febrero en Berlín. Almunia se ha mostrado claramente a favor de aumentar los recursos del Fondo y de "seguir el ejemplo de Japón". Bruselas quiere que el FMI refuerce la supervisión multilateral del sector financiero. La Comisión también aboga por una mayor cooperación entre el FMI y el Fondo de Estabilidad Financiera.

La recuperación, "en entredicho"

Antes del inicio de la cumbre, el vicepresidente segundo y ministro de Economía, Pedro Solbes, ha afirmado hoy que el hecho de que la economía española se recupere a finales de 2009 es un tema "en entredicho". Así, ha admitido al igual que hizo ayer la Comisión Europea que habrá que esperar a 2010 para empezar a ver la luz al final del túnel ya que los "últimos datos" no permiten pensar que en el "segundo semestre veremos una clara recuperación". En su opinión,"hay que seguir esperando y viendo lo que sucede en el mundo y en Europa" para establecer una previsión fiable sobre la duración de la recesión.

En este sentido, el ministro ha querido destacar que el Gobierno mantiene su previsión de que el producto interior bruto (PIB) caerá este año un 1,6% -frente a diversos organismos que esperan una contración mayor, de hasta el 3%- y ha asegurado que ese cálculo ya toma en consideración "parte de los fenómenos que ahora estamos viendo". Además, ha insistido en que el Gobierno intentó ser "lo más realista posible" con sus previsiones de enero, que apuntan a una caída del crecimiento del 1,6% en 2009.

El vicepresidente ha optado por apelar al BCE, cuyo presidente Jean Claude Trichet expresó ayer "una opinión ligeramente más favorable", especialmente por lo que se refiere a la evolución en términos de liquidez. Dado el nivel de incertidumbre, a juicio de Solbes "es pronto para sacar conclusiones todavía sobre el año" o para revisar a la baja las previsiones de crecimiento. En la misma línea, el Ecofin y la Comisión Europea admitieron ayer que por el momento no hay señales de que la economía europea haya tocado fondo y vaticinaron que, al contrario de lo estimado hasta ahora, la recuperación no se iniciará hasta 2010.

Convergencia con Europa

El vicepresidente también se ha referido al retroceso en el nivel de convergencia de la economía española con la media de la Unión Europea (UE) y ha explicado que es "un tema puntual", debido a la caída del crecimiento -menor que la de sus socios, ha recalcado- combinada con el mantenimiento de los flujos de inmigración y el aumento de la población activa. Solbes ha afirmado que se trata de un "problema de números", un "ajuste temporal, al que no hay que dar mayor importancia".

Agentes de la Policía retiran a los activistas de Greenpeace de la puerta principal de la sede de la UE en Bruselas durante la reunión de ministros de Economía de la UE.
Agentes de la Policía retiran a los activistas de Greenpeace de la puerta principal de la sede de la UE en Bruselas durante la reunión de ministros de Economía de la UE.EFE

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_