La CEOE elige qué quiere ser de mayor
La patronal se debate entre al menos tres candidatos a suceder a Díaz Ferrán - Los empresarios afrontan la modernización de una entidad pensada en 1977
"Mi teléfono arde". Lo dice uno de los miembros de la CEOE, pero se le podría atribuir a cualquiera de la gran patronal española, sobre todo, a cualquiera de sus 21 vicepresidentes, que viven días sin precedentes: si un pacto no lo impide, se preparan las que serían las primeras elecciones con más de un candidato en la historia de una organización que solo ha tenido tres presidentes en 33 años. Y ninguno de ellos ha sido elegido en comicios con más de un rival.
Juan Rosell, presidente de la catalana Fomento, y Jesús Banegas, presidente de la nueva patronal tecnológica Ametic (recién nacida de la fusión entre Aetic y Asimelec), ya han hecho oficial su intención de lanzar la candidatura al puesto en sustitución de Gerardo Díaz Ferrán. Y Santiago Herrero, el líder de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), tiene previsto anunciar lo propio en la junta directiva de la CEOE del próximo miércoles. Son varios de los vicepresidentes de la institución los que creen que, además, pueden añadirse nuevos nombres a la carrera. Pero los defensores del pacto -entre ellos, el propio Rosell, que todavía quiere llegar a un acuerdo con sus rivales para presentar una candidatura única liderada por él- no tiran la toalla ante la cita electoral del 21 de diciembre. Cuentan con casi dos meses por delante.
Un sector aún cree posible pactar una candidatura única a la presidencia
Rosell se siente con más respaldos que sus rivales: Banegas y Herrero
Si en algo coinciden los empresarios es que la casa debe modernizarse para asumir los retos del siglo XXI. La CEOE no solo escoge a una persona, se enfrenta, en fin, a su ser o no ser: al modelo de un presidente más gestor frente al de un empresario; de patronal agente activo del diálogo social o con mayor acento en el grupo de presión; calibra el peso de las organizaciones territoriales frente al poder de las sectoriales. Examina una estructura formada por más de 200 entidades. Busca a la persona que dará la cara por los empresarios para las grandes reformas, el futuro de las pensiones y de la negociación colectiva.
La CEOE pasó en 2007 de un gestor -José María Cuevas- a un empresario, Díaz Ferrán. A éste último se le achaca desde distintos ámbitos haber actuado más como grupo de presión que como agente activo del diálogo social. "A Cuevas se le reprochaba que era muy conservador, pero también era muy flexible, y pragmático, sabía que era necesario pactar. Ferrán ha sido un poco outsider, muy afín al PP, y creo que el presidente futuro tendrá que ser más proclive al diálogo", explica una fuente activa del diálogo social en la época de Cuevas.
El futuro presidente de la CEOE, reconocen varios vicepresidentes, también tendrá que reconstruir la imagen de la patronal. Díaz Ferrán ha protagonizado junto a su socio, Gonzalo Pascual, un sonoro fiasco empresarial: el imperio turístico en torno a Air Comet y las agencias de viajes Marsans ha acabado en bancarrota con miles de trabajadores sin cobrar, después se ha traspasado a un especialista en quiebras, y ambos pueden ser declarados responsables de la suspensión de pagos por la justicia.
Ferrán ha abandonado el barco tras un año de crisis sin recibir críticas de los empresarios. Rosell, si le sucede, quiere dejarle como presidente de la Fundación CEOE, al igual que ocurrió con Cuevas hasta su fallecimiento. El líder de la patronal catalana intenta su segundo asalto a la confederación empresarial después de que en 2006 tuviera que desistir a enfrentarse a Cuevas por lo que en su momento calificó como "circunstancias políticas", en un momento en el que las relaciones entre Barcelona y Madrid eran más que tensas por el debate del Estatuto. El entorno de Rosell está convencido de que ahora es diferente. Ha salido fortalecido de las elecciones en Fomento tras barrer a su rival, el empresario Joaquim Boixareu, próximo a CiU. Las fuentes consultadas aseguran que Rosell cuenta ya con el apoyo seguro de las organizaciones territoriales de Cataluña y Aragón, del Instituto de la Empresa Familiar y que esta semana cinco o seis entidades más lo apoyarán. Rosell espera también, según estas fuentes, lograr el respaldo de la patronal madrileña, la CEIM. Y para ello se ha reunido también con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, con gran ascendente sobre esta organización. Según fuentes cercanas al empresario catalán, Rosell quiere seguir con la modernización de la CEOE y convertirla en un lobby que influya en la esfera política. "Quiere un modelo de patronal pura y dura", remachan.
El empresario se enfrenta, no obstante, a los recelos que en algunos sectores despierta su procedencia, o a la imagen de desfilar tras una senyera para protestar contra la sentencia del Tribunal Constitucional que anulaba parte del Estatuto catalán. Su entorno asegura, no obstante, que no ha hallado apenas problemas por ello, y sostienen que Rosell garantizará la independencia política de la CEOE. De hecho, se le atribuyen simpatías por el sector moderado del PP, aunque en Cataluña ha llegado a acuerdos con las Administraciones de CiU y el tripartito y con los agentes sociales.
Jesús Banegas es consciente de que Rosell ha partido antes, y que ha cosechado apoyos importantes en la cúpula de grandes organizaciones dentro de la CEOE, pero siente que podrá contar con el respaldo de buena parte de las sectoriales y no tiene remilgos a la hora de pedir el voto persona por persona. La decisión está en manos de más de 840 vocales procedentes de 230 organizaciones.
"Aquí el voto es individual, secreto e indelegable, así que el pacto entre organizaciones no va a ser fácil. Tu vicepresidente te pude decir que votes a alguien, pero debe haber convencimiento, no hay disciplina", apunta uno de los vicepresidentes, en la misma línea que otros.
Fuentes que apoyan la candidatura de Banegas defienden su condición de representante de la nueva economía frente a modelos de empresarios más superados. También creen que será más independiente del poder político y una mayor ruptura respecto a la etapa anterior, pero sus detractores le atribuyen perfil directivo, pero una reducida carrera como empresario por cuenta propia, con la creación de pequeñas firmas. "Yo quiero elecciones", recalca Banegas, que rechaza la posibilidad de un pacto. Quiere fortalecer la independencia de la patronal y lograr su autofinanciación. "La CEOE debe caminar para convertirse en un faro que lidere a la sociedad civil para contrarrestar el poder de los Gobiernos", recalca Banegas.
Santiago Herrero tiene previsto emprender la carrera a la presidencia la semana que viene. En el pasado hizo un amago ante Cuevas y ante Díaz Ferrán. Fuentes empresariales andaluzas insisten en la fortaleza de la candidatura de Herrero si se consideran los parámetros de "trayectoria y eficacia" y recalcan que "el modelo de patronal" que propugna es el que "mayores y mejores resultados" ha proporcionado. "El cambio de modelo a otro perfil ya se ha visto los resultados ofrecidos", afirman en referencia a Díaz Ferrán.
Las mismas fuentes apuntan que las críticas a Herrero por llevarse bien con la Junta socialista son su fortaleza, por cuanto en 30 años de democracia, siempre con Gobiernos socialistas en Andalucía, se ha creado una CEA grande y fuerte, informa Juan Méndez. Hasta el día 21, los tres nombres tendrán tiempo para ir perfilando programas y prioridades.
"Cualquiera de los tres candidatos es bueno si lleva un proyecto nuevo de patronal, para cambiar su filosofía anticuada. Hasta ahora ha funcionado como la parte económica del llamado sindicato vertical, que es lo que han sido las relaciones laborales en España. Necesita una nueva función", asegura el profesor de la escuela de negocios Iese José Ramón Pin. Para este analista, Rosell representa la actitud de diálogo frente a las Administraciones; Herrero, la continuidad a Cuevas, y Banegas en una nueva concepción de patronal basada en la independencia y la búsqueda de la competitividad y convertir la organización en un think tank.
El ex ministro de Trabajo y vicepresidente de la Fundación IDEAS, Jesús Caldera, no opina sobre personas, pero destaca: "las políticas de concertación son más eficientes incluso en términos económicos que las que se imponen. Hay que volver al diálogo social, porque toda medida no pactada es menos institucionalizada".
Los sindicatos, aunque insisten en el respeto en el proceso, esperan un candidato que retome el diálogo social. "Se trata de un debate que no se ha zanjado en la organización, si deben ser un interlocutor entre capital y trabajo o bien un lobby alejado de los sindicatos", asegura el secretario de Acción Social de CC OO, Ramón Górriz. Cuevas respondía al perfil de gestor e interlocutor, Díaz-Ferrán ha imprimido a la CEOE ese papel de grupo de presión. El secretario de Acción Social de UGT, Toni Ferrer, opina que no les ha ido mal como lobby, pero a corto plazo: "La reforma laboral les favorece. ¿Pero a qué precio? A largo plazo se pierde el diálogo social y se asume el riesgo de conflictividad laboral".
Tres presidenciables para la casa
- Juan Rosell (Fomento). Juan Rosell, presidente de la patronal catalana Fomento del Trabajo, ya amagó en 2006 con presentarse a presidir la CEOE frente a Cuevas, pero no llegó a presentar su candidatura. Ahora, en cambio, cree que cuenta con el apoy0 de las oganizaciones clave.
- Santiago Herrero (CEA). El líder de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Santiago Herrero, ha recibido el apoyo del empresariado andaluz para lanzarse a la carrera y planea anunciar su candidatura el miércoles en la junta directiva. Ya aspiró en dos ocasiones.
- Jesús Banegas (Ametic). El presidente de la patronal tecnológica y de telecomunicaciónes Ametic (fruto de la fusión entre Aetic y Asimilec) confirmó el viernes su voluntad de optar al puesto. Espera granjearse el apoyo de las grandes organizaciones sectoriales. No quiere pacto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.