La Bolsa se recupera sólo a medias

Los mercados de valores esbozaron ayer un conato de recuperación del último susto provocado por el sector financiero. La Bolsa española, sin embargo, tuvo dificultades para incorporarse a las ganancias globales ante las reiteradas recomendaciones de venta de los valores bancarios por parte de algunas agencias de calificación que, casi sistemáticamente, están rebajando el nivel de estas entidades.

El Ibex 35 recuperó el 1,91% para cerrar en 7.357,50 puntos, mientras que la Bolsa de París ganaba el 4,74%; la de Francfort, el 5,42% y la de Londres, el 3,81%. Los valores medianos y pequeños del mercado español tampoco tuvieron un comportamiento muy positivo y terminaron con ganancias del 0,51% y del 1,62%, respectivamente.

Inversores y analistas han perdido la poca confianza que les quedaba en algún tipo de recuperación de los mercados, después de comprobar la enorme capacidad que tienen los gestores de muchas entidades financieras para ocultar sus problemas hasta el último minuto. Lo sucedido el pasado lunes en los mercados de todo el mundo fue un ataque de pesimismo al constatar los inversores que todavía hay entidades financieras que no han puesto al día su situación y, sobre todo, que aún puede haber más que hagan anuncios sorpresa en un futuro inmediato.

En el entorno económico tampoco hay nada en lo que apoyar una decisión a medio plazo, pues se continúa destruyendo empleo a gran velocidad y los resultados y planes de las empresas están ajustándose a una situación en la que su actividad va a decrecer.

El informe sobre empleo de una consultora privada publicado en Estados Unidos avanza la destrucción de casi 700.000 puestos de trabajo en febrero en el sector privado, lo que indica que no se ha tocado fondo en el desarrollo de ese círculo perverso de despidos, descenso del consumo y nuevo deterioro de la actividad empresarial.

La contratación en el Mercado Continuo superó ligeramente los 3.000 millones de euros. Algunas operaciones en el mercado de bloques con 58 millones de acciones de Telefónica aportaron 851 millones de euros a esa cifra, mientras que las operaciones del mercado abierto se quedaron por debajo de los 2.000 millones de euros, de los que el 70% se concentró en los cinco principales valores.