El alemán Stark arbitrará el primer Madrid-Barcelona europeo

El árbitro Wolfgang Stark, alemán de 41 años, dirigirá el Real Madrid-Barcelona del próximo miércoles, ida de las semifinales de la Liga de Campeones. Será el quinto partido de la Champions que pitará el colegiado esta temporada, el segundo con el Madrid. La primera vez que se cruzó con el equipo de Mourinho fue en los octavos de final, en el Lyon-Madrid, encuentro en el que no vio un claro penalti del francés Gourcuff, que interceptó con el brazo una falta lanzada por Cristiano Ronaldo. Será la primera vez que arbitrará el Barcelona este año.

Internacional desde 1999, ya ha dirigido seis veces al Real Madrid. El balance con los blancos es de tres victorias en las liguillas (dos frente al Marsella -1-3 y 4-2- y una ante el Rosenborg, 0-2), un empate (el de este año en octavos) y dos derrotas (con el Lyon, 2-0 y el Juventus 2-1, ambas en la fase de grupos). Arbitró también a Mourinho en otras tres ocasiones. El curso pasado pitó el Inter-Barça de la liguilla, que también representa su único precedente de un Mourinho-Guardiola, y en la victoria de los nerozazzurri (0-1) en Londres, ante al Chelsea. El año anterior, fue el que dirigió el Manchester United-Inter (2-0), que supuso la eliminación del conjunto italiano en octavos de final.

Al Barcelona, Stark le ha arbitrado en cinco ocasiones, cuatro veces en la Champions, con un balance de una victoria y tres empates, y una más en la UEFA, en la temporada 2003-2004. Entonces, el Barça perdió 1-0 en el campo del Celtic, escocés, y supuso su eliminación. Sin embargo, los recuerdos en la máxima competición continental son todos positivos con el alemán. El año en el que los azulgrana levantaron la Copa de Europa, arbitró el Lyon-Barcelona (1-1) en octavos y la ida de la semifinal Barça-Chelsea, que terminó con un empate a cero. El curso pasado dirigió el ya mencionado Inter-Barça y la goleada que el conjunto culé endosó al Arsenal (4-1), con una actuación estelar de Messi, realizador de todas las dianas azulgrana.

El sábado, tras la cita liguera, Guardiola había afirmado que un árbitro portugués, como el que el año pasado dirigió la ida entre Inter y Barcelona de las semifinales, haría feliz al entrenador del Madrid. Pero el silbato será alemán.