Primera directora en el Real

"Cuando dirijo soy un músico. Me olvido de todo y lo único que me importa es saber comunicarme con la orquesta y con los intérpretes para hacerles llegar lo que siento". Eun Sun Kim (Seúl, 1980) será la primera mujer que dirija desde el foso del Teatro Real una ópera en el coliseo madrileño. Il viaggio a Reims, de Rossini, va a ser para Kim una nueva aventura profesional con un montaje escénico de Emilio Sagi. En Stuttgart dirigió Las bodas de Fígaro y Dido and Aeneas en producciones de la Escuela Superior de Música y la Orquesta de Cámara de esa ciudad.

Esta directora, que llegó a España hace dos años tras ganar el Concurso de dirección Jesús López Cobos, finalizará su contrato en el mes de julio y probablemente vuelva a Alemania, donde estudió parte de su carrera y donde antes de venir a Madrid había logrado varios contratos para dirigir teatros.

Cuando se sitúa ante la orquesta apenas necesita usar la batuta

Eun Sun Kim ha estado toda su vida vinculada a la música. A a los cuatro años empezó tocando el piano, pero una lesión en el brazo le impidió seguir profesionalmente con ese instrumento y se dedicó a la composición y la dirección de orquesta. En su país fue la primera mujer que logró dirigir una orquesta. "Ahora ya hay dos más, pero no es muy frecuente que las mujeres desarrollen ese aspecto profesional. Tal vez sea porque la sociedad es demasiado conservadora para ello".

Cuando Kim se sitúa frente a la orquesta casi no le hace falta batuta; sus ojos negros y los gestos de su cara son suficientes para que los músicos interpreten sus órdenes. Entre sus compañeros del Teatro Real reconocen su "capacidad de trabajo, su esfuerzo y su humildad". La producción de Il viaggio a Reims forma parte del proyecto pedagógico que el Teatro Real tiene con la Universidad Carlos III de Leganés. Los músicos pertenecen a la Orquesta-Escuela de la Sinfónica de Madrid y los intérpretes fueron seleccionados entre cerca de un centenar de candidatos. Todos tienen menos de 32 años. "Estoy muy ilusionada con este proyecto porque es la primera ópera que pongo en marcha desde cero y he contado con dos grandes profesionales, como el director de escena Emilio Sagi y el maestro de canto Raúl Giménez", indica la joven maestra.

Il viaggio a Reims es un drama divertido, estrenado en 1825. El montaje de esta obra fue creado por Emilio Sagi en 2000 para el Festival Rossini de Pesaro y posteriormente se llevó al Teatro Real. La producción se recupera para el proyecto pedagógico del coliseo madrileño. "Rossini es un compositor que tiene un repertorio fantástico para ser interpretado ante personas que nunca han ido a la ópera, porque es alegre y divertido. No es una ópera fácil, pero los jóvenes que se subirán al escenario tienen entusiasmo y estoy segura de que lo harán bien", afirma Kim.

La directora asegura que durante la preparación de la obra ha disfrutado con la armonía y el ritmo de la música. "Me da pena ver a la gente joven que se marca una meta profesional y no es capaz de disfrutar con lo que tiene delante. Hay de disfrutar, es muy importante entenderlo desde el principio porque si no te pierdes algo estupendo", puntualiza Kim.

El maestro de canto Raúl Giménez, que antes de dedicarse a la enseñanza desarrolló como tenor una prestigiosa carrera internacional que le llevó por los mejores teatros del mundo, destaca lo que a su juicio tiene la música de Rossini: "Armonía, ritmo y estructura armónica". Durante las tres semanas que Giménez ha estado trabajando con los intérpretes ha incidido precisamente en esos aspectos, tratando de corregir errores de afinación. "Estamos ante una generación muy preparada y lo importante es convencerles de que lo interesante de esta profesión es el camino, no el éxito. Es necesario trabajar mucho y muy duro para combatir todos los obstáculos que te puedes ir encontrando. Es una generación con una rapidez mental excepcional". Sin embargo, detecta que su autoestima es bastante baja, sobre todo entre los jóvenes cuyas edades oscilan entre los 19 y 21 años. "No es sencillo lograr que se desarrollen como artistas personas con un gran potencial de voz pero con la autoestima por los suelos", asegura.

Emilio Sagi, que de 2001 a 2005 fue director artístico del Teatro Real, ha elaborado para esta obra un montaje con pocos medios escénicos. Sitúa la acción dramática en una estancia balnearia de tintes aristocráticos, en donde se va desarrollando la trama coral de la ópera a través de ocurrentes hallazgos en la caracterización de los personajes. "La comedia enseña a tener mesura. Si sobreactúas puedes hacer el ridículo y queda anticuado. Hay que aprender a no pasarse", señala Sagi. Con respecto a la obra, cree que "Rossini es un compositor muy bueno para aprender. Es exigente y a nivel de técnica vocal complicado. Necesita mucho estudio y mantiene la tensión en todo momento"

Eun Sun Kim va rompiendo barreras casi de puntillas. Ha colaborado con directores como Jiri Belohlávek, Roberto Abbado, Eliahu Inbal, Ivor Bolton o Víctor Pablo Pérez. No volverá a Corea porque su vida profesional está en Europa, donde se siente más identificada profesionalmente.