¿Qué debes hacer con la pata de jamón, los restos de langostinos o el cotillón? Solo hay una manera correcta de deshacerse de ellos

Durante estos días de fiestas, cada español genera más basura de lo habitual. Una gran parte corresponde a productos que solo se consumen en estas fechas y de los que a veces desconocemos cuál es el cubo de basura correcto para depositarlos

Salón de una vivienda tras una fiesta navideña.
Salón de una vivienda tras una fiesta navideña.Getty Images/iStockphoto

Sin ninguna duda, el peor momento de estos días de fiestas es recoger y adecentar nuestra casa después de una celebración. Aunque este año la covid limitará las reuniones de grupos grandes para evitar los contagios, no significa que no vayamos a generar más residuos de lo habitual y que no debamos separarlos para reciclar. Y es que en estas fechas vacacionales la basura generada equivale al 30% de la del total de todo el año, según datos del INE. Los residuos cotidianos se juntan con otros que solo vemos por estas fechas: muérdago, el árbol de Navidad, los matasuegras o las luces de colores fundidas. El cansancio y el desconocimiento nos puede llevar a no acertar con el contenedor correcto e incluso a tirar todos los residuos en una única bolsa. ¿Qué puedes hacer para acertar a la hora de separar la basura durante estas fechas?

El mayor problema es que en estos días el reciclaje no solo depende del anfitrión, sino también de todos los comensales. Celebres estas fiestas con quien las celebres, lo idóneo es que todo el mundo sepa tirar cada desperdicio donde corresponde. Una buena idea es colocar en la cocina o en el lugar del banquete varias cajas de cartón (de esas que hayas guardado de tus compras por Navidad) con una bolsa dentro de ellas para cada desecho: los que van al contenedor amarillo (envases plásticos, briks y latas); los que van al azul (papel y cartón); los de vidrio; los que van al gris (aquella basura que no se puede reciclar); lo orgánico... A las personas con las que comas o cenes, indícales que en tu casa se separa y muéstrales dónde están tus contenedores navideños caseros. Para evitar despistes, puedes poner una pegatina que asocie cada caja con los colores de cada cubo. Si quieres quedar como un buen anfitrión, incluso puedes pegar en cada uno una lista con el tipo de basura que admite.

Si tienes dudas sobre dónde van algunos objetos, consulta el siguiente gráfico interactivo.

Otro de los episodios que siempre se repite es el de las sobras de comida. Recuerda que los alimentos en mal estado deben ir al cubo marrón, donde van los restos orgánicos. Ahí también debes arrojar esos restos de tarta que se han quedado pegados a la caja de cartón antes de depositarla en el contenedor azul. El resto puedes aprovecharlo. Nunca tires las salsas: mételas en un pequeño bote de cristal y guárdalas en el congelador para usarlas en otra ocasión. En Internet también hay multitud de recetas basadas en las sobras navideñas para hacer otros platos y evitar estar comiendo durante varios días el mismo menú de Nochevieja.

Un árbol de cartón y un belén con envases de yogures

Si ya eres un experto separando envases y quieres ir un poco más allá, el siguiente paso es asegurarte de que los objetos navideños de este año estén fabricados con material reciclado. El ejemplo más claro es el árbol de Navidad. Si este año decides comprar un árbol artificial comprueba que esté elaborado con plástico reciclado y, si se rompe, fíjate en el resto de los materiales que lleva. Muchos contienen elementos electrónicos (pilas, cables, luces…) y deben depositarse en un punto limpio. La idea más ecológica es comprar uno de cartón reciclado y guardarlo para los próximos años, o construir uno con esas cajas que se acumulan en casa durante esos días. Esto último es mucho más original y luego puedes depositarlo sin problema en el contenedor azul que está al lado de tu casa.

De papel reciclado también se pueden envolver los regalos del día de Reyes, y en lugar de lacitos de tela usar cuerda biodegradable. Sustituir estos objetos, principalmente en la decoración, no solo reduce el impacto medioambiental, sino que puede ser una actividad divertida para pasar en familia; especialmente ahora cuando quedarse en casa es tan importante. Hay multitud de blogs y videotutoriales en la web que muestran cómo elaborar muérdago con papel de colores o un portal de belén con cartulina y envases de yogur. Al finalizar las fiestas, recuerda depositar cada material en su cubo correspondiente. La cartulina y papel en el azul y los botes de plástico de yogur en el amarillo.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS