La policía detiene en Zaragoza al asesino de un pizzero hace 23 años en Alemania

Giuseppe Sabia, dueño de una pizzería, murió en febrero de 1993 en un bosque a las afueras de la vieja ciudad alemana Mannheim. Había sido maltratado antes de que un disparo en la cabeza acabara con su vida. El crimen parecía condenado a engrosar la lista de casos sin resolver. Hasta ayer, lunes, cuando la policía detuvo en Zaragoza a un ciudadano alemán de 44 años que había sido vecino de la víctima y al que el ADN incrimina.

Las investigaciones de la policía española se iniciaron el pasado mes de abril, después de que los investigadores recibieran una petición de colaboración por parte de la fiscalía de Mannhein, que reclamaba la localización "de un ciudadano español que podría estar implicado en la comisión del asesinato", según una nota facilitada este martes por la policía.

Los datos facilitados por la fiscalía permitieron localizar en Zaragoza a un varón de 44 años, nacido en Weinheim (Alemania) y que vivió en Mannheim durante 20 años. Tras el crimen, se había trasladado a España. El cotejo de los vestigios hallados en la escena del crimen con el ADN del sospechoso, de nacionalidad alemana, ha permitido "relacionarlo de forma directa con la muerte de Giuseppe Sabia mediante un disparo en la cabeza".

Agentes del Grupo de Homicidios de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Brigada Regional de Policía Judicial de Zaragoza, en colaboración con la policía alemana de Mannheim., detuvieron al sospechoso, cuyo delito no prescribe, porque en Alemania los delitos de asesinato son siempre perseguibles. Ahora está pendiente de su extradición.

Editado por Jorge A. Rodríguez