_
_
_
_

El doble juego de "J.M."

La Fundación FAES que preside José María Aznar, presidente de honor del Partido Popular, ha vuelto en pocos días por sus fueros y advierte de los riesgos que se ciernen sobre el partido ante las elecciones generales del 20-D, entre los que destaca la grieta en el espacio del centro-derecha."Nada", afirma un editorial en la revista Cuadernos de Pensamiento Político "está decidido y todo está pendiente de resolverse". Solicita que se profundice en las razones que han llevado a esta situación, nada menos que en la larga campaña preelectoral del 20-D.

La nueva irrupción de Aznar es sugerente. Si bien es coherente con sus declaraciones del 28 de septiembre, doce horas después de las elecciones autonómicas catalanas del 27-S y horas antes de la reunión del Comité Ejecutivo del PP convocada para esa tarde, tiene lugar tras un artículo del expresidente en el que parecía, el pasado viernes 16, propiciar una tregua con Mariano Rajoy ante la dura campaña electoral.

Aznar hizo en el periódico El Mundo una defensa cerrada del llamado Pacto del Majestic que selló la alianza con el partido Convergencia i Unió de Jordi Pujol en 1996, una alianza que le permitió formar Gobierno después de considerar, tras unas elecciones que el PP ganó por algo más de 300.000 votos, que si él, Aznar, era un obstáculo, se largaría. "Me quito de en medio", afirma Aznar que le dijo a Manuel Fraga.

La vuelta al Hotel Majestic de Barcelona, según fuentes del PP, tiene una explicación. Y es que Aznar ha sido criticado también por ese pacto. ¿También? Sí. Porque también sus relaciones con Francisco Correa y sus empresas, que se remontan a los años 2000, con la boda de su hija en El Escorial como metáfora, han sido criticadas como la fuente de uno de los escándalos de corrupción, el caso Gürtel, que han provocado un deterioro del PP.

En relación al citado pacto, sectores del PP no estiman consecuente la dura crítica de Aznar a Rajoy en el tema de Cataluña cuando, señalan, el propio expresidente hizo concesiones económicas al necesitar los votos de Pujol para gobernar en 1996. De aquellos polvos vienen estos lodos, sugieren esos dirigentes.

Bien.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Más allá del debate de fondo sobre el Majestic, veamos cómo se las gasta Aznar.

En su artículo del viernes 26 el expresidente señala:

  El pacto fue una elección de éxito del Partido Popular. De todo el Partido Popular. Conté con un equipo de negociación comprometido y competente, con una conciencia muy clara de las exigencias del momento. Para los lectores suspicaces, aclararé que precisamente una de las personas clave en este acuerdo fue Mariano Rajoy y que nunca lo ha ocultado. En varias ocasiones durante la legislatura anterior, en circunstancias bien distintas desde luego, habló de un posible "Majestic II" y en su autobiografía, publicada en 2011 ('En confianza', Planeta), lo explica bien:

 "El objetivo de las negociaciones estaba muy claro para nosotros. Se trataba de hacer un pacto para cuatro años con luz y taquígrafos; un pacto que fuera un compromiso público para toda la legislatura, con transparencia y claridad y con un mecanismo de seguimiento y cumplimiento... La imagen de ese acuerdo de apoyo de CiU al Gobierno del PP, en el cual yo tuve una participación muy activa llevando gran parte de la negociación y alcanzando puntos de entendimiento, fue la fotografía de la cena en el hotel Majestic de Barcelona. Por eso se bautizó como 'el pacto del Majestic'... Gracias a ello hicimos posible una de las etapas más brillantes de la reciente historia contemporánea de España".

  Es interesante.

  Aznar utiliza el libro publicado por Rajoy en septiembre de 2011, ante las elecciones del 20-N, para atribuirle la presunta importancia que tuvo el actual presidente del Gobierno en la negociación con Pujol del Pacto del Majestic.

En rigor, si uno va a la autobiografía de Rajoy (En confianza, Editorial Planeta, 2011), página 96, lo que se encuentra es otra cosa. El autor, antes del párrafo citado por Aznar, habla de la voluntad del PP de "llegar a acuerdos". Y se refiere no solo a CiU.

"El PP demostró su voluntad de llegar a acuerdos, sin ceder en sus puntos programáticos básicos, no solo con los nacionalistas catalanes y con Coalición Canaria, sino también con el PNV. Desde un año antes ya habíamos tenido algunas reuniones conjuntas". Es a continuación de este párrafo cuando Rajoy habla sobre "el objetivo de las negociaciones".

Aznar, pues, usa la mención de Rajoy en su autorretrato para mostrar que el propio Rajoy asume que tuvo una "participación muy activa" en la negociación del Pacto.

En otras palabras si se descodifica lo que está diciendo Aznar a sus críticos o "lectores suspicaces", como les llama, es lo siguiente: no deberían atacarle por el Pacto del Majestic, habida cuenta de que estarían atacando al mismísimo Rajoy.

Bien.

¿Pero por qué no acude Aznar a sus memorias? ¿Por qué se sirve del libro escrito con urgencia por Rajoy ante las elecciones del 20-N?

La respuesta es simple. Porque no puede.

¿Por qué?

¿Acaso porque no habla en sus memorias del Pacto del Majestic?

Precisamente por lo contrario. Porque sí habla. Pero no en los términos que necesita utilizar contra Rajoy. Y ellos los encuentra en la autobiografía de Rajoy.

Todo el mundo sabe que Rodrigo Rato fue el hacedor del Pacto del Majestic. Al punto que la primera reunión secreta se hizo en el molino que Rato posee en Carabaña (foto inferior) situado en lo que se llama la Alcarria de Alcalá, en la Comunidad de Madrid. Hasta allí llegó Pujol secretamente para acudir a la primera reunión.

Bien.

En su libro Memorias I (Planeta, noviembre de 2012), Aznar aborda, página 237, las negociaciones. 

Dice esto:

Pujol se tomó su tiempo. Venía de apoyar al Partido Socialista incluso contra el viento de la corrupción y la marea de la crisis económica.Y ahora tenía la posibilidad de prestar el apoyo decisivo a un Gobierno del PP. Decidió prolongar la negociación, un poco por necesidad, otro poco por regodeo, para demostrar que era imprescindible. En esa partida, jugó muchas cartas de las que conocí detalles significativos.

Como se puede apreciar, esto no podía usarlo contra Rajoy.

Y sigue:

Mantuve dos conversaciones con Pujol: una, en el molino de Rodrigo Rato en Carabaña, y otra, en la casa del empresario Pedro Ballvé, que era amigo mío desde hacía muchos años. No entramos en ningún detalle concreto sobre el pacto de gobernabilidad que luego firmaríamos. De eso se ocupó Rodrigo y negoció muy bien. Había sido nuestro portavoz parlamentario y tenia excelentes relaciones con CiU. Mis conversaciones con Pujol fueron generales, de análisis histórico, político y económico de España, cuya existencia como marco común Pujol reconocía, lo que facilitaba el entendimiento.

Aquí, pues, Aznar no podía encontrar munición contra Rajoy. Y echó mano, por tanto, a la autobiografía de aquel al que había designado con su dedazo en septiembre de 2003. Como suele ocurrir, los políticos y sobre todo sus asesores mediáticos utilizan los productos cosméticos Max Factor para embellecer su trayectoria. Aznar, o alguien de su entorno, al encontrar la cita en la que Rajoy alardea con el Pacto del Majestic dijo ¡Bingo! 

"De eso [los detalles económicos y fiscales sobre cesión recaudación IRPF] se ocupó Rodrigo y negoció muy bien", nos cuenta en sus Memorias I Aznar.

Seamos comprensivos.

¡Cómo citar a Rodrigo Rato en estos momentos! ¡Cómo reafirmar que fue el artífice, el gran artífice, del Pacto del Majestic!

Además, se trataba de usar contra Rajoy algo que él mismo había escrito para frenar las críticas que está recibiendo Aznar por las negociaciones de 1996 con Pujol, de Carabaña al Majestic.

Por ello, este gambito de Aznar no ha supuesto tregua o pacto alguno con Rajoy. Ha sido simplemente un caramelo envenenado.

Comentarios

¡Córcholis!, el Gran Hombre se ablanda. Ha debido ver que hay gente que ya le considera "el pasado".
Si el PP tuviera un sistema similar al de USA donde los candidatos son elegidos por las bases partidarias, estado por estado, nunca se hubiera llegado a situaciones de este tipo.En una palabra: mientras no haya una auténtica democracia practicada en las sedes partidarias, toda la dialéctica va a parar a la alcantarilla. Y así es como tenemos tantos fusibles quemados. (Léase líderes )
Yo creo que detrás de esto hay una maniobra de poder dentro del PP y de los medios asociados. Y queda en el aire algo más importante. El relato que quedará sobre el nacionalismo en España,Blog "Pajas y obviedades - "Del Pacto del Majestic al día de hoy" http://pajobvios.blogspot.fr/2015/10/del-pacto-del-majestic-al-dia-de-hoy.html
No es necesario ir hasta los Estados Unidos, para encontrar organizaciones en España que sus representantes, digo bien representantes y no líderes, son elegidos por sus bases. Así funciona el PSOE, aúnque se trata de ocultar.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_