El pésimo resultado del 21-O fuerza al PSOE a plantearse un cambio de rumbo

El PSOE va a acometer "todos los cambios que sean necesarios" -en su discurso político y sus propuestas, no entre los miembros de la dirección- para superar el descalabro de ayer en las elecciones gallegas y vascas, y considera que el mensaje que le han enviado los ciudadanos es que debe ir "más deprisa y más a fondo" para recuperar su confianza. Es la conclusión a la que ha llegado el núcleo duro del partido, reunido esta mañana en la comisión permanente de la Ejecutiva Federal para analizar el resultado de las elecciones en Galicia y el País Vasco, y que ha expresado la vicesecretaria general del partido, Elena Valenciano, aunque no ha detallado en qué va a consistir la estrategia para lograr ese objetivo. La número dos de los socialistas ha abogado por "restablecer las alianzas con los sectores progresistas", ha descartado cambios "cosméticos o superficiales" y ha rechazado la dimisión de Rubalcaba, quitando importancia a las voces que desde ayer vienen pidiendo una reflexión crítica tras el 21-O. "[En la Ejecutiva] No se ha planteado la dimisión de Rubalcaba. Hace solo ocho meses que celebramos un congreso federal. Tenemos una tarea y un mandato, y vamos a cumplirlos", ha zanjado.

La número dos del PSOE ha avanzado que el próximo lunes habrá una reunión de la Ejecutiva y que antes de fin de año se convocará un Consejo territorial y un Comité Federal: así es como el partido "acelerará" su presentación de alternativas. A principios del año próximo, además, se celebrarán -aunándolas y adelantándolas en el calendario- las conferencias programáticas que estaba previsto celebrar a lo largo de 2013.

El líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, comparecerá el próximo lunes tras el pleno de la Ejecutiva. No lo ha hecho hoy, según ha explicado la vicesecretaria general, porque está preparando el debate de Presupuestos que se celebra mañana en el Congreso. Valenciano no ha restado importancia a la derrota electoral y a la difícil situación en la que se encuentra el partido. "No sé si es el peor momento del partido en 35 años" —ha comentado en referencia al diagnóstico que había hecho el eurodiputado socialista Juan Fernando López Aguilar— pero desde luego es malísimo".

Según la dirección del PSOE, la derrota de este domingo se enmarca en el "ciclo electoral negativo" que comenzó en las autonómicas y municipales de 2011 y "que todavía no ha terminado". En palabras de Valenciano, la confianza "se pierde con mucha facilidad pero para poder recuperarla se necesita tiempo".

Antes de conocer las conclusiones de esa reunión, el presidente del PSOE, José Antonio Griñán, tras admitir la "pérdida evidente" de votos socialistas, ha señalado la necesidad de "hacer un análisis más profundo en el seno de la Ejecutiva Federal", ya que considera que la primera reflexión debe producirse en Galicia y el País Vasco. Griñán ha trasladado su "solidaridad y comprensión" a los compañeros socialistas.

Sobre el escenario político abierto en el País Vasco tras el resultado electoral, ha asegurado que PNV y PSE "tienen mucho que hablar y decidir de manera conjunta"

Pero las voces han sido más críticas en otros dirigentes. Antes de iniciarse la reunión, el eurodiputado socialista Juan Fernando López Aguilar ha dicho que el PSOE atraviesa una situación "muy grave, la peor en 35 años" y ha considerado que ha llegado el momento de "arreglarlo", pero sin hacer "giros dramáticos" ni con "titulares impactantes" ni con un "socialismo de twitter".

"No nos van a reprochar que hagamos autocrítica, que dediquemos un tiempo a nuestra capacidad de ser útiles", ha afirmado el dirigente socialista, quien ha opinado que "los españoles no reconocen ya al PSOE como su alternativa, como su herramienta para cambiar esa política" de la derecha que "es hegemónica en Europa".

La necesidad de cambio ha llegado también del secretario de Organización del PSOE de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Vaquero, considera, tras los resultados que quizá haya "que dar un giro al timón" en lo que son las políticas y cómo se están enfocando y que "a lo mejor sería razonable perfilar" también quién será el candidato del partido para las próximas elecciones. Sin embargo, el secretario general del PSOE de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, considera que "más que dimisiones", lo que necesita es "escuchar los mensajes de la gente". "Es absolutamente imprescindible el reconocimiento de los errores cometidos", porque es el "mejor camino para poder defender los aciertos".

La permanente del PSOE está formada por una especie de núcleo duro de la dirección, de la que forman parte de esta comisión la vicesecretaria general, Elena Valenciano, el secretario de Organización, Óscar López, y el presidente del partido, José Antonio Griñán. También forman parte de esa permanente la portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, Soraya Rodríguez, el Portavoz del Grupo Socialista en el Senado, Marcelino Iglesias, y el Secretario General de Juventudes Socialistas, Nino Torre, así como los miembros de la dirección que son secretarios de área: Purificación Causapie,Antonio Hernando Vera, Inmaculada Rodríguez-Piñero, María González Veracruz, Gaspar Zarrías, Jesús Caldera, Trinidad Jiménez, Mª del Mar Villafranca, Hugo Alfonso Morán, Juan Moscoso del Prado, Rafael Simancas, Soledad Pérez y Carmela Silva.

Aunque podía haberlo hecho con carácter de urgencia, Rubalcaba no reunirá a la Ejecutiva en pleno hasta el próximo lunes 29. Será en esa cita donde, previsiblemente, estén presentes los candidatos socialistas en estas elecciones, el gallego Pachi Vázquez ‑vocal sin cartera en la ejecutiva- y el vasco Patxi López -secretario de Relaciones Políticas-. Pese a que López sí forma parte de la permanente, no se ha desplazado a Madrid.

La convocatoria llega después de que la dirección federal achacara el mal dato en Euskadi a la irrupción de Bildu —que modifica todo el reparto del poder de los años en los que las marcas abertzales postBatasuna fueron ilegales— y el de Galicia a la elevada abstención, que superó el 36%. Pero el hecho es que el descalabro —una caída de 10 puntos porcentuales en las dos comunidades— es bastante peor de lo esperado.

Vamos a analizar los datos “con serenidad pero sin excusas”, dijo ayer el secretario de Organización, Óscar López.

Esta misma mañana, en una entrevista en la Cadena Ser, el secretario del grupo parlamentario socialista, Eduardo Madina, ha admitido que "tenemos que haber una lectura de fondo porque la crisis está cambiando las políticas. Los resultados que esperábamos eran mejores". "La marca PSOE ha tenido un mal resultado", ha indicado. Ante la posibilidad de cambio en la estructura del PSOE, Madina ha contestado que "corresponde al partido ir decidiéndolo".

Ya anoche, a través de twitter, la exministra Beatriz Corredor, reclamó una "imprescindible verdadera, profunda, valiente y responsable" y la también exministra María Antonia Trujillo fue más tajante: “Esperando que Rubalcaba anuncie su dimisión”, escribió. Carme Chacón se limitó a declarar: "Tiempos difíciles" y a enviar su apoyo a los socialistas vascos y gallegos y Odón Olorza señaló la necesidad de "una catarsis".