El hallazgo de fosas con restos de al menos 27 personas devuelve los días de terror a Tamaulipas

Los huesos de al menos 27 personas han sido encontrados en más de una decena de fosas clandestinas del municipio de Reynosa, en el Estado de Tamaulipas. El hallazgo fue anunciado el 14 de julio por el colectivo Amor por los desaparecidos, una de tantas agrupaciones del país dedicadas a rastrear a las más de 111.000 personas desaparecidas en México, las víctimas de una grave crisis de violencia que no presenta síntomas de estar cerca del final. En un primer momento, las rastreadoras encontraron los restos de tres cuerpos, pero a medida que continuaron excavando en la zona, decenas más salieron a la luz. La Fiscalía estatal, que había guardado silencio hasta ahora, ha confirmado este martes el descubrimiento.

Los forenses del Ministerio Público ya han comenzado a analizar los restos y el organismo ha comenzado una carpeta de investigación al respecto. Las mujeres buscadoras del colectivo llegaron a las fosas gracias a la pista de una llamada anónima, de acuerdo con la prensa local. Los restos encontrados presentan un avanzado estado de descomposición, aunque, según los medios de la región, algunos de los cuerpos ya han podido ser identificados por los familiares gracias a las prendas de ropa y tatuajes, a la espera de los exámenes definitivos de los peritos.

La violencia no cesa en Tamaulipas. El Estado, uno de los más castigados desde la llamada guerra contra el narco —la estrategia militar que durante los sexenios de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto dejó un reguero de miles de cadáveres por todo el país— se ensañó especialmente en la región. Durante el Gobierno del actual presidente, Andrés Manuel López Obrador, la crisis tampoco ha dado tregua, a pesar de su iniciativa de abrazos, no balazos, una política de no confrontación con el crimen organizado en oposición a sus predecesores que, sin embargo, no ha disminuido las cifras de homicidios y desapariciones.

Tamaulipas es la segunda entidad del país con mayor número de desaparecidos, 13.017, solo superada por Jalisco, con 14.895. Las noticias de fosas clandestinas, restos humanos, balaceras, secuestros, asesinatos y torturas forman parte de su actualidad desde hace años. Cerca de la ciudad de Matamoros se encuentra La Bartolina, un paraje calificado como “centro de exterminio” de los grupos criminales del lugar del que se han rescatado más de media tonelada de restos humanos.

Ante la omisión y la inactividad del Estado, los colectivos de madres buscadoras como Amor por los desaparecidos fueron, desde el principio, el principal motor —y en muchas ocasiones, único— para localizar a las decenas de miles de mexicanos que se esfumaron sin dejar rastro. Las madres han recibido durante años ataques y amenazas del crimen organizado. Algunas, ante el abandono de las autoridades, han llegado a negociar con los grupos criminales para que les permitan buscar a sus seres queridos en paz.

La exhumación de los restos de 27 personas de las fosas de Reynosa supone uno de los mayores hallazgos de los últimos tiempos. Una noticia que puede dar algo de esperanza a los colectivos de búsqueda en el Estado, después de meses en las que las únicas novedades eran más sucesos violentos: militares masacrando a civiles a sangre fría, balaceras alrededor de colegios, bloqueos de carreteras, caravanas criminales, ataques armados y una lista abrumadora. Quedan por delante los análisis forenses y seguir excavando en el terreno en búsqueda de otros posibles restos.

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