El reto de la transparencia en los sindicatos mexicanos: menos del 10% han rendido cuentas sobre sus recursos

La rendición de cuentas sigue siendo una asignatura pendiente para los sindicatos mexicanos. Aunque la reforma laboral establece que estas organizaciones deben informar a sus agremiados sobre el origen y destino de sus recursos, solo 249 de unos 6.000 sindicatos activos han cumplido con este requerimiento, según las cifras del Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral. El director de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, Alfonso Domínguez Marrufo, señala que es un derecho que deben exigir los propios agremiados a su organización, un reto hacia el futuro, para el propio organismo laboral. “Los sindicatos de carácter nacional sí han rendido cuentas. Muchos no lo hacen porque los trabajadores no han exigido ese derecho”, declaró este miércoles el directivo.

El director del Centro Federal de Conciliación Laboral aseveró que solo aquellos sindicatos de grandes estructuras, que cuentan con todo un equipo de contadores como el IMSS, Pemex o la Comisión Federal de Electricidad (CFE) han cumplido con este requerimiento. Domínguez Marrufo reconoció que un cambio legal que permitiese sancionar a los sindicatos que no rindan cuentas se evaluará en una siguiente etapa de la reforma laboral. “Tampoco nosotros tenemos demasiados instrumentos todavía en la ley para poder hacer coactiva esta obligación, salvo la multa, pero los tribunales laborales deberían de estar ya en el caso del reclamo de un trabajador de que no hay rendición de cuentas, ya obligar al sindicato, incluso imponer medidas de apremio específicas”, admitió el director.

“En muchos Estados se registraron sindicatos de comerciantes, tianguis, boleros, taxistas y, entonces, hay todavía un submundo que son sindicatos, pero son asociaciones de trabajadores que no tienen un contrato colectivo de trabajo”, reconoció. En México, actualmente, la tasa de sindicalización es de un 17% del total de trabajadores asalariados.

A tres años de que comenzó la implementación de la reforma laboral en México, Domínguez Marrufo informó de que a la fecha se han legitimado 23.316 contratos colectivos de trabajo en el país y aún hay 10.140 documentos en trámite validación. Así, el organismo laboral prevé cerrar el proceso de legitimación de contratos colectivos con cerca de 33.000 registros de un total de un total de 140.000 contratos colectivos que estaban registrados en las juntas laborales, antes a la reforma. Una depuración de contratos que avalan solo a los convenios que sí protegen a sus agremiados y eliminan aquellos documentos que solo amparaban los intereses de las empresas.

A la fecha, el Centro Federal de Conciliación --que sustituyó a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje-- refiere que tienen un nivel de conciliación del 69%. Un hito en materia laboral, porque esto implica que las controversias entre patrón y empleado se resuelven en menos de 45 días y no tienen que pasar por un tribunal, contrario a aquellos juicios que podían representar para el afectado un gasto en tiempo y recursos de años.

“La reforma laboral no tiene como objetivo acabar con los sindicatos o con los viejos sindicatos, es más bien, acabar con las prácticas de simulación de los sindicatos. Hay que renovarse o morir, o cambian (los sindicatos) su forma de relación con sus trabajadores, o esas organizaciones están destinadas a desaparecer porque se van a quedar sin contratos colectivos de trabajadores”, concluyó. Desde que comenzó la implementación de la reforma laboral a la fecha, este cambio en la legislación y las nuevas obligaciones de verificación y consulta han supuesto una inversión de 23.000 millones de pesos.

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