La cancelación de la cumbre de la Alianza del Pacífico favorece los diálogos bilaterales

La cancelación de la cumbre de la Alianza del Pacífico ha sido fructífera para los diálogos bilaterales de la región. Después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador pidiera posponer el evento que estaba previsto para esta semana porque el Congreso de Perú había negado el viaje a Pedro Castillo, los mandatarios de Chile, Ecuador y Colombia optaron por mantener su agenda en México. Gabriel Boric llegó el martes por la noche y tuvo dos días intensos de actividades, uno de ellos dedicado en gran parte a reuniones con López Obrador y su equipo. Guillermo Lasso visitó este jueves al inquilino de Palacio Nacional, con quien mantuvo una conversación privada sobre la relación bilateral. Gustavo Petro, por su parte, ha llegado este jueves también a Ciudad de México, donde participará de los diálogos por Venezuela y se encontrará con el presidente mexicano, con quien debatirá, entre otras cosas, la situación migratoria y las deportaciones de colombianos de México.

Corta, pero intensa. Así calificó Boric su gira por México. En su primer día en el país, el presidente chileno visitó Palacio Nacional, donde mantuvo una reunión privada junto a López Obrador y las dos primeras damas. En ese encuentro cerraron acuerdos en materia de educación, cooperación internacional, economía y medio ambiente, según explicaron. Boric se reunió además con decenas de empresarios mexicanos y chilenos, en un desayuno en el que promovió la inversión extranjera en Chile. Este jueves, el mandatario visitó por la mañana un colegio en la alcaldía Coyoacán y por la tarde visitó el Senado y a la jefa de Gobierno capitalina, Claudia Sheinbaum.

Los detalles de los acuerdos alcanzados entre los dos Gobiernos fueron explicados en un comunicado en conjunto publicado este miércoles. En materia educativa, las autoridades de ambos países deberán establecer este año una mesa de trabajo para facilitar el reconocimiento de los títulos académicos otorgados por el otro. En cooperación internacional, acordaron “profundizar en los esfuerzos como región para la consecución del desarrollo sostenible y la protección del medio ambiente”. En economía, apuntalar el comercio bilateral y organizar una visita de empresarios mexicanos a Chile. López Obrador aceptó además la invitación a la conmemoración del 50 aniversario del golpe a Salvador Allende, que se celebrará el año siguiente en Chile, lo que representaría uno de los pocos viajes del mandatario mexicano al exterior durante su mandato.

Y en el ámbito multilateral, los Gobiernos de Boric y López Obrador se han comprometido a mantener “su disposición para valorar positivamente sus respectivas candidaturas a organismos internacionales”. Este punto de acuerdo llega después de la lucha por la presidencia del Banco Interamericano de Desarrollo, en la que Chile, Argentina y México fracasaron en ponerse de acuerdo y llevar todos un candidato común, y perdieron la elección frente al brasileño Ilan Goldfajn, apoyado por Estados Unidos. En una conferencia de prensa conjunta, el presidente chileno admitió que de haber tenido un “diálogo más profundo”, el resultado hubiese sido otro.

A Boric se sumó este jueves la visita de Lasso, su tercera a México en lo que va de mandato. El presidente ecuatoriano se encontró con López Obrador para debatir la relación económica y comercial entre los dos países, y profundizar la cooperación bilateral, según publicaron ambos Ejecutivos en un comunicado. Uno de los puntos importantes de ese diálogo estuvo centrado en “los retos de la seguridad a nivel regional”. Ecuador enfrenta actualmente un problema con el narco, que se disputa el control de la tierra, y las bandas están ampliamente vinculadas con los cárteles de la droga mexicanos. Para atender a esto, los mandatarios se comprometieron a “compartir información e intercambio de experiencias en el combate al crimen organizado”.

Ecuador y México negocian también un acuerdo comercial, clave para el ingreso del primero en la Alianza del Pacífico. De acuerdo al comunicado, ambas Administraciones “instruyeron a sus equipos negociadores a tener, en el plazo de una semana, una propuesta de beneficio para los dos países en los temas relacionados a banano y camarón, que permita el cierre adecuado de la negociación”. Antes de abordar el avión, Lasso dijo ante la prensa que esperaba que su visita sirviera para “finiquitar” la última etapa de las negociaciones.

Gustavo Petro ha viajado a México también pese a la cancelación de la cumbre. Tiene motivos para ello. Allí se van a reanudar este fin de semana los diálogos entre el Gobierno y la oposición venezolana que tanto empeño ha puesto él en que se restablezcan. Desde que fue elegido presidente se acercó a Maduro, al que ha tratado de reintegrar en la normalidad regional. Aprovechará su viaje al país norteamericano para verse el viernes con López Obrador, con quien mantiene una buena sintonía. Juntos quieren liderar el nuevo eje de izquierdas regional.

El primer objetivo, que era poner en marcha la discusión de Venezuela, ya está dado. Desde hace unos meses vienen hablando también de ofrecer a Rusia y Ucrania una mediación para alcanzar la paz, aunque no ha terminado de concretarse. Esas iniciativas les ha valido algunas críticas porque de cierta forma equiparan al país agredido y al agresor. Además, abordarán algún que otro tema espinoso entre los dos países. Colombia se ha quejado del trato que reciben sus ciudadanos al llegar a Ciudad de México, donde a veces son retenidos y expulsados por migración. En lo que va de año han sido deportados casi 22.000 colombianos. Después de ver a López Obrador, Petro tendrá un encuentro con la jefa de Gobierno de la ciudad, Claudia Sheinbaum. Allí será declarado huésped distinguido de Ciudad de México y luego firmará el libro de visitantes ilustres.

Los encuentros estaban programados para darse en medio de la cumbre de la Alianza del Pacífico. Ese evento deberá ahora replantearse, ante la imposibilidad de Castillo de viajar a otro país a recibir la presidencia del organismo del que forman parte Chile, México, Colombia y Perú. Boric dijo en su visita que la semana siguiente se encontrará con el presidente peruano, y podrá debatir con él la estrategia para llevar el encuentro a Lima, y poder pasarle así finalmente la estafeta.

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