Los policías contemplan las ruinas a las que ha quedado reducido el hotel Paradise, de propiedad israelí y situado en la playa de Kikambala, a unos 25 kilómetros al norte de Mombasa.APLa televisión de Kenia muestra los destrozos originados por la explosión. Pasadas las 7.30 (6.30, hora española), tres terroristas han empotrado un todoterreno cargado de explosivos contra el hall del hotel. Varios testigos han indicado que los kamikazes, de fisonomía árabe, han comenzado a lanzar bombas antes de que el coche estallara.APUna vista aérea da muestra de la enorme potencia de la explosión. En el transcurso de la mañana , el número de víctimas mortales ha ido ascendiendo. El último balance es de 15 fallecidos: nueve africanos, una persona de edad, dos niños israelíes y los tres autores del atentado.APVarias de las víctimas yacen entre los escombros del complejo hotelero. Tras el atentado, el hotel ha sido acordonado y los servicios de inteligencia kenianos se han hecho cargo de las investigaciones, que parecen haber dado sus primeros frutos con la detención de dos personas cuya identidad no ha sido revelada.APUna pareja de militares kenianos hacen guardia frente a la entrada del derruido hotel. En el momento del atentado, unos 140 turistas israelíes acababan de llegar al hotel-tras bajarse precisamente del avión atacado- y se disponían a registrarse.APLa imagen muestra el avión cargado de turistas israelíes que fue atacado sin éxito por misiles antiaéreos.APPasajeros y familiares se abrazan con el terror todavía en el rostro en el aeropuerto de Tel Aviv una vez aterrizado el avión atacado.AP
