Trànsit se defiende de las críticas por el corte de la AP-7: “Queríamos evitar un choque múltiple”

Una fuerte granizada que comenzó a caer esta sábado a media tarde obligó a cortar la autopista AP-7 en los dos sentidos de la marcha entre las localidades barcelonesas de Llinars del Vallès y Sant Celoni, mientras que la nieve cortó también el Eje Transversal en Santa Coloma de Farners (Girona). El temporal, iniciado a las 16.30 horas, provocó cortes en las autopistas y retenciones que atraparon a conductores hasta seis horas en sentido Girona en la autopista. Tras la granizada, las máquinas quita nieve limpiaron los carriles de esta arteria de comunicación en sentido Barcelona, pero en sentido norte la autopista se colapsó, como numerosos testimonios relataron a emisoras de radio. El granizo llegó desde la zona del Baix Montseny hasta la misma playa de Mataró, por lo que caos de tráfico se trasladó a la carretera que une Sant Celoni con el Maresme, con hasta 10 kilómetros de retenciones entre esta población y Vallgorguina; y también entre Vilalba Sasserra y Cardedeu.

Ante la indignación y las críticas de numerosos conductores afectados, el director del Servicio Catalán de Tráfico, Ramon Lamiel, ha explicado este domingo que las autoridades optaron por cortar la vía “para evitar un choque múltiple” como el que se produjo hace dos años en la autovía del Maresme y que causó hasta 11 heridos. “Lamento las molestias, siempre se puede hacer mejor, pero se hizo el corte conservador para evitar un choque múltiple”, ha afirmado en Rac-1 y ha explicado que durante esta madrugada se ha producido un accidente en la zona, lo que muestra el impacto que la presencia de granizo tiene sobre la conducción.

Sobre las cuatro horas que pasaron entre que las palas limpiaron la vía en sentido Barcelona y lo hicieron en sentido Girona, Lamiel ha respondido: “Habrá que preguntar a los titulares de las vías”. Las quita nieves son del Ministerio, ha precisado. Y ha expresado su satisfacción porque no se produjera “una situación como la de la C-32, el choque múltiple de hace dos años”.

Las explicaciones no han satisfecho a Junts per Catalunya que tiene la intención de pedir la comparecencia en el Parlament del consejero de Interior, Joan Ignasi Elena, por “el caos circulatorio” registrado tras la granizada. En un comunicado, Junts ha señalado que desea disponer de toda la información sobre el operativo y el protocolo de actuación que aplicó Trànsit y, por tanto, “el Departamento de Interior”. “En las últimas horas, varios afectados ha denunciado un conjunto de negligencias de la Generalitat”, dice Junts en la nota.

El Servei Català de Trànsit informó de que la granizada afectó también a la circulación en la C-35, en la misma comarca del Vallès, así como en la C-25, entre Espinelves (Girona) y Sant Julià de Vilatorta (Barcelona). Se da la circunstancia de que poco antes de que se cortase la AP-7 por esta incidencia meteorológica se ha registrado un accidente en esa vía, en sentido Girona, que ocasionó tres kilómetros de retención en Santa Maria de Palautordera (Barcelona). Pese a su pequeño tamaño, las bolas de hielo del granizo impiden circular a los coches, porque las ruedas resbalan si no están preparadas con neumáticos de invierno.

En la carretera C-25, conocida como Eje Transversal, la nieve obligó a cortar también el tráfico entre Santa Coloma de Farners y Folgueroles, ambas en la provincia de Barcelona. Por este caso, el Departamento de Territorio de la Generalitat activó máquinas quita nieve para limpiar la calzada y extender sal.

Nieve en el Montseny

Mientra, la zona de Santa Fe del Montseny (Barcelona) acumuló tres centímetros de nieve. También nevó en la comarca de Osona, en poblaciones com Viladrau. Por la tarde, las lluvias pasadon desde el interior de Catalunya hacia la costa, en algunos lugares con granizo. Asimismo, se han mantenido en el cuadrante nordeste y otros puntos del Prepirineo y norte de la depresión Central: “Son de intensidad débil o puntualmente moderada” y a veces con granizo, explicó el Meteocat.

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