ESPECIAL PUBLICIDAD
Contenido patrocinado por una marca

Un viaje al futuro más sostenible

La reconversión del sector turístico es ya una realidad. Empresas como Cepsa y clientes toman decisiones sobre sus vacaciones y sus viajes con una clara conciencia medioambiental que pone por delante criterios como la sostenibilidad

Uno de los aviones que vuelan con SAF (combustible sostenible de aviación, por sus siglas en inglés) procedente de los Energy Parks de Cepsa.
Uno de los aviones que vuelan con SAF (combustible sostenible de aviación, por sus siglas en inglés) procedente de los Energy Parks de Cepsa.010

El turismo es un sector clave en la economía mundial. Pero además de crear riqueza y empleo, la industria turística genera un 8% de los gases de efecto invernadero que se producen en el planeta, de los cuales el 3,5% pertenecen al tráfico aéreo. La buena noticia es que todo problema puede generar una oportunidad, y es precisamente el ámbito del transporte, tan vinculado con el turismo, uno de los más concienciados en su descarbonización.

La Agencia Internacional de la Energía estima que, en los próximos cincos años, la demanda de biocombustibles –entre ellos, los denominados de segunda generación, fabricados a partir de residuos orgánicos que no compiten con la alimentación, como los aceites usados de cocina o los desechos agrícolas o ganaderos, entre otros– crezca un 20%. ¿El motivo? La utilización de biocombustibles puede llegar a reducir hasta en un 90% las emisiones de CO₂ respecto a los combustibles tradicionales, por lo que son un elemento clave para impulsar la descarbonización del transporte, especialmente en sectores en los que la electrificación es compleja como el transporte pesado por carretera, el marítimo y el aéreo.

En la energética, que ya representa el 35% del mercado de suministro energético para el sector aéreo en España, se han marcado el objetivo de liderar la fabricación de biocombustibles de segunda generación en la península ibérica

Aunque estos combustibles ya se están utilizando de forma habitual, a partir de 2030 comenzarán a estar más presentes en sectores como la aviación y el transporte marítimo. La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) prevé que 300 aerolíneas de todo el mundo alcancen el nivel cero de emisiones para el año 2050. Esto supone eliminar en las próximas tres décadas unas 21 gigatoneladas de CO₂. La clave pasa por aumentar la cantidad de combustible sostenible de aviación (conocido como SAF, por sus siglas en inglés), que sustituya al queroseno fósil. El impulso del SAF está alineado con el conjunto de medidas Fit for 55 de la Comisión Europea, que incluye el reglamento RefuelEU Aviation, cuyo objetivo es impulsar la descarbonización de la aviación en la UE, y así alcanzar un uso de SAF del 2% en 2025; del 6%, en 2030, y del 70%, en 2050.

Un camión cisterna de Cepsa suministra biocombustible avanzado a un ferry en el puerto de Algeciras (Cádiz).
Un camión cisterna de Cepsa suministra biocombustible avanzado a un ferry en el puerto de Algeciras (Cádiz).

Compañías como Cepsa están en la senda de ayudar a sus clientes en su descarbonización. En este sentido, en la energética, que ya representa el 35% del mercado de suministro energético para el sector aéreo en España, se han marcado el objetivo de liderar la fabricación de biocombustibles de segunda generación en la península ibérica. En 2030 ya contarán con una capacidad de producción anual de 2,5 millones de toneladas de biocombustibles, de las que 800.000 toneladas serán de SAF, una cantidad suficiente como para sobrevolar 2.000 veces el planeta. De hecho, ya ha comenzado a comercializarlo en cuatro de los aeropuertos españoles con más tráfico aéreo.

La compañía también está impulsando la descarbonización del transporte marítimo. Además de abastecer biocombustibles de segunda generación a barcos para el transporte de mercancías, este verano los ha suministrado para 84 trayectos de ferry entre Algeciras y Ceuta. Es la primera vez que barcos de pasajeros viajan en España con combustibles sostenibles en sus depósitos. Un nuevo paso para avanzar hacia un turismo más respetuoso con el planeta.

Archivado En