20 fotosAire libre20 jardines maravillosos para disfrutar este veranoDel onírico vergel de Las Pozas, en México, a los jardines de Versalles, cerca de París, espacios verdes muy apeteciblesElena Sevillano26 jun 2019 - 08:02CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceSe conoce popularmente como Las Pozas, pero su nombre oficial es Jardín Escultórico de Edward James. El artista británico, mecenas del movimiento surrealista, creó este vergel onírico en una antigua plantación de café del municipio de Xilitla (San Luis Potosí, México), en la selva de la Huasteca Potosina. En 1962 comenzó a edificar 27 esculturas y edificios, algunos enormes, con puertas abiertas a la nada y escaleras al cielo. Sus casi nueve hectáreas de jardín (con orquídeas y vegetación autóctona) y sus 37 hectáreas de estructuras abrieron al público en 1991. En 2007 fue adquirido para su preservación por la Fundación Pedro y Elena Hernández. El Gobierno de México lo declaró Monumento Artístico en 2012.AlamyKenrokuen forma, junto con Korakuen (en Okayama) y Kairakuen (en Mito), la terna de jardines más bellos de Japón, según los propios nipones. Su nombre significa Jardín de los Seis Atributos, y hace referencia a que este espacio verde combina y aúna los seis elementos del jardín perfecto, según dejó escrito el famoso poeta chino Li Gefei en su libro de jardinería: espacio, calma y serenidad, elementos artificiales y antiguos, agua abundante, amplias vistas. Alberga la casa de té Yugao-tei, la casa de descanso Shigure-tei, el puente Ganko-bashi, los majestuosos pinos Karasaki o la fuente más antigua del país. En 1985 fue declarado Sitio Nacional de Belleza Escénica Especial.Puripat Lertpunyaroj (getty)Es fácil pasear por los jardines del Generalife, en la ciudad palatina andalusí de la Alhambra, y evocar todo el refinamiento y la exquisitez de la corte del Reino nazarí de Granada. La villa se construyó en el Cerro del Sol, a finales del siglo XIII, como lugar de descanso de los sultanes. Combina el palacio homónimo con otras edificaciones, los jardines ornamentales, los patios (el de la Acequia es el más emblemático) y los huertos. El frescor de las plantas, la fragancia de las flores, los brillos y sonidos del agua –elemento vital de este paisaje– son un llamamiento a la calma. Las visitas nocturnas añaden magia a la experiencia.Vladislav Zolotov (getty)Versalles, patrimonio mundial, no sería Versalles sin su parque y sus jardines a la francesa. Una alfombra de 800 hectáreas, refinada y majestuosa, que se extiende a las puertas de palacio. Cuenta con 300 hectáreas de bosque, un invernadero de naranjos (L'Orangerie), estatuas y 55 estanques (el más grande de los cuales es el Gran Canal). También tiene fuentes que de abril a octubre bailan sus aguas al ritmo de la música en algunos momentos del día. Abarcarlo todo en una sola jornada es prácticamente imposible, aunque se puede intentar alquilando una bici o un coche eléctrico, o en el trenecito turístico que recorre el Gran Trianón (pequeño palacio de mármol rosa), el Pequeño Trianón o el Dominio de María Antonieta.Rudy Sulgan (getty)In 1954, el señor Pisit y la señora Nongnooch Tansacha compraron algo más de 240 hectáreas cerca de Pattaya, en la provincia de Chon Buri (Tailandia), para convertirlas en una plantación de mangos, naranjas, cocos y otras frutas locales. Tras un viaje al extranjero, la señora Nongnooch decidió que aquello sería un vergel tropical de flores y plantas ornamentales de todo el mundo: jardín inglés y europeo, cactus, especies de Nueva Caledonia, Asia, América tropical o África central. Abrió al público en 1980, añadiendo a las flores que lo han elevado a centro botánico de renombre internacional espectáculos con elefantes, ceremonias religiosas, demostraciones de artes marciales o masajes, un zoo, restaurantes, un hotel y casas de alquiler de estilo tailandés.Evgeny Baranov (getty)El estanque de Mercurio, el Jardín de la Danza, el Jardín de las Damas o la Galería de Grutesco son algunas de las paradas obligatorias cuando se visitan los jardines del Real Alcázar de Sevilla, espacio clave dentro del conjunto palaciego amurallado (patrimonio mundial), con origen en el siglo X y elementos que se han ido superponiendo a lo largo de más de diez siglos de historia: arte islámico, mudéjar, gótico, renacentista, manierista o barroco. Los jardines más antiguos de la ciudad han llegado a nuestros días muy cambiados respecto a su trazado original, aunque su esencia morisca se mantiene en los azulejos, los canales, las fuentes o los surtidores. En verano albergan conciertos nocturnos de música.Aritz Tabuyo (Alamy)Podría decirse que Claude Monet creaba dos veces. Primero como agricultor, cultivando con primor nenúfares, juncos, lirios. Y, después, como pintor, inmortalizándolos en un lienzo. Su gran modelo y fuente de inspiración fueron los dos jardines que diseñó en Giverny, en la región de Normandía (Francia), donde se trasladó con su familia en 1883. Ideó un jardín de flores, Les Clos Normand, delante de su casa, ordenado por colores, con árboles frutales, rosales trepadores, malvarrosas. Diez años después compró el terreno vecino, atravesado por un arroyo, y construyó el jardín de agua, con su famoso puente japones cubierto de glicinias.Samantha Ohlsen (Alamy)El Jardín del Maestro de las Redes, o del Pescador, considerado uno de los mejores de China, es el más pequeño de los jardines residenciales de la ciudad de Suzhou, declarados patrimonio mundial. Fue creado durante la dinastía Song, en el siglo XII, y profundamente rediseñado y rebautizado con su actual nombre en el XVIII por un funcionario de la dinastía Qing. Combina arte, naturaleza y arquitectura en un conjunto armónico que fue utilizado como modelo para el Ming Hall Garden (o Astor Court) del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York; una miniatura suya fue exhibida en el Centro Pompidou de París en 1982.AlamyRefinamiento árabe de palmeras y fuentes de agua susurrante. El Jardín Majorelle asoma, refrescante, en el corazón de Marrakech, como el sueño del pintor francés Jacques Majorelle, que necesitó 40 años para crear este oasis exótico de caminos sombreados, arroyos, estanques llenos de nenúfares y flores de loto. El viento murmurando entre las hojas, los pájaros cantando, el aire cargado de aroma a jazmín. Y un edificio pintado en un añil vibrante, con todo su encanto morisco aderezado por toques art decó. Yves Saint-Laurent y Pierre Bergé compraron la propiedad, que estaba abandonada, en 1980; conservaron la vivienda para su uso privado, transformaron el taller en museo de arte islámico y restauraron el jardín.AlamyKirstenbosch, término utilizado por los boers o afrikaners para designar “jardín botánico”, es el mayor de los ocho jardines botánicos nacionales de Sudáfrica, y está considerado uno de los más bellos del planeta. Más de 7.000 especies diferentes de plantas de la región –aromáticas, medicinales, ornamentales– crecen en sus 528 hectáreas divididas en 470 hectáreas de vegetación natural y 58 de jardines acondicionados. Kirstenbosch alfombra la Montaña de la Mesa, a 13 kilómetros del centro de Ciudad del Cabo, y en verano invita a disfrutar de conciertos al aire libre, durante la puesta de sol, todos los domingos.Diriye Amey (getty)Ejemplo magistral de jardín italiano, con una abrumadora sucesión de esculturas (que reutilizan el mármol de la villa romana de Adriano), grutas (como la de Diana), fuentes (la más famosa, la Fontana dell’Ovato), juegos de agua y música. Los jardines de la Villa d'Este, en Tívoli, cerca de Roma, han sido modelo para réplicas de edén manieristas y barrocas en toda Europa. Son, junto a su palacio, joya del Renacimiento y patrimonio mundial. El sueño del cardenal Hipólito II (hijo de Lucrecia Borgia) hecho realidad por el paisajista Pirro Ligorio, que se inspiró en los jardines colgantes de Babilonia para organizar una serie de terrazas que se conectan y pasean a través de escalinatas y pendientes.Riccardo Sala (Alamy)El nombre no podía haber sido más acertado: Jardín del Milagro (Miracle Garden) es un espacio de 72.000 metros cuadrados cubierto por más de 45 millones de flores que crecen en mitad del desierto de Dubái, una de las zonas más áridas e inhóspitas del mundo. Un milagro de la tecnología, en todo caso, que se inauguró en el Día de San Valentín de 2013 y se ha convertido en el mayor jardín de flores naturales del mundo. Alfombra formas extravagantes, excesivas incluso: desde relojes a pavos reales con las colas desplegadas pasando por aviones, coches, casas o barcos. Un parque de atracciones floral que, eso sí, cierra en verano; volverá a abrir de noviembre a abril de 2020. Hasta para los milagros hay límites.Dan Rentea (Alamy)El Château de Villandry, el último de los grandes castillos del Loira (Francia) edificado durante el Renacimiento, debe su fama a sus seis elegantes jardines franceses, concebidos como lienzos vegetales, cada uno con un tema y un diseño diferentes. Un plano cenital sobre el Huerto Decorativo revela, por ejemplo, un tablero de ajedrez multicolor; las plantas del Jardín Ornamental dibujan arpas, notas musicales, mariposas, corazones o abanicos; mientras que en el de Simples se cultivan hierbas aromáticas y medicinales. Están también el jardín del Agua, y el del Sol, y un laberinto convertido en la atracción favorita de los niños.Sander Meertins (Alamy)En alemán, Volksgarten significa "parque del pueblo". Se trata de un parque público, triangular y decimonónico, de unas nueve hectáreas de extensión, convertido en uno de los más populares y frecuentados de Viena. Incluye una rosaleda con más de 3.000 ejemplares de más de 200 variedades, un jardín botánico y una ecléctica profusión de esculturas, fuentes y monumentos. Destacan la estatua sedente dedicada a Sissi (la emperatriz Elisabeth), erigida en 1906, y el Templo de Teseo, réplica neoclásica del templo griego de Hefestión de Atenas diseñada por el arquitecto Pietro Nobile en el siglo XIX.Iain Masterton (Alamy)Mainau, en mitad del lago Constanza, conectada con tierra firme mediante un puente, no se apoda la isla de las flores por casualidad. Su pequeña superficie (45 hectáreas) colorea gracias a un jardín en el que abundan especies tropicales y subtropicales. De junio a agosto florecen unas 9.000 rosas de casi 400 variedades distintas en su jardín italiano, creado en 1871 por el duque de Baden. Su Casa de la Palmera es un invernadero en el que crecen más de 20 tipos diferentes de este árbol, además de una colección de 1.200 orquídeas. Y su Casa de Mariposas es la más grande de Alemania. Completan la postal sus árboles centenarios y, asomando por encima de sus copas, su impresionante palacio de estilo barroco.Sina Ettmer (Alamy)Unas 50.000 plantas viven en los Reales Jardines Botánicos de Kew, al sudoeste de Londres. Es un centro puntero internacional en la investigación botánica, declarado patrimonio mundial, y también un foco turístico muy atractivo para los visitantes. El jardín de plantas carnívoras, el mediterráneo, el de bambú, uno para los niños, uno de roca, otro de hierba, uno más japonés (en la foto la restaurada Casa Templada), todos conviviendo con estructuras icónicas como la Gran Pagoda. En sus 120 hectáreas hay varios invernaderos, de especies alpinas, o de frutas y vegetales comestibles; el más grande de ellos, el de la Princesa de Gales, permite viajar del desierto a los trópicos a través de diez zonas climáticas diferentes.Steve Tulley (Alamy)Hasta el 29 de septiembre se celebrará el Festival de las Fuentes de los Jardines Longwood: espectáculos de agua para dar la bienvenida a una completa programación veraniega para toda la familia. Más color sobre estas ya de por sí coloridas 445 hectáreas de bosques, prados y jardines que se extienden junto a Kennett Square, en el Estado de Pensilvania (Estados Unidos). Veinte jardines exteriores y otros tantos interiores, en invernaderos llamados conservatorios. Talleres, actividades para niños y clases para jardineros desde amateurs a profesionales. Y todo mientras florecen algunas variedades de rosas, hibiscus, orquídeas o magnolias.scott biales (Alamy)La cantidad y diversidad de plantas (más de un millón de ejemplares de 900 variedades de temporada) que albergan los Jardines Butchart hacen que su superficie de más de 22 hectáreas en Brentwood Bay (isla de Vancouver, Columbia Británica) esté ininterrumpidamente en flor de marzo a octubre. En verano, los visitantes disfrutan de todo el esplendor de peonías, iris o rosas. Este espacio colorido existe gracias a Jennie Butchart, quien a principios del siglo XX empezó a transformar, con sus propias manos, la cantera de caliza que había dejado de explotar su marido. El trabajo que comenzó ella lo realiza ahora un equipo de 50 jardineros.keith sutherland (getty)Tan espectacular como efímero, el jardín Keukenhof, en Lisse , a mitad de camino entre Ámsterdam y La Haya, solo abre en primavera (del 21 de marzo al 10 de mayo en 2020), cuando florecen más de siete millones de bulbos de 800 variedades de tulipanes. Es el jardín de tulipanes más grande del mundo pero en sus 32 hectáreas se pueden contemplar además jacintos, narcisos, rosas, claveles, lirios, azucenas. Y orquídeas, a las que dedica uno de sus cuatro pabellones. En otro, llamado Juliana, se organiza la exposición 'Tulip-Manía'. Los niños pueden disfrutar de búsquedas del tesoro, un laberinto o una granja de animales con gallinas y cabras.StevanZZ (getty)El arquitecto paisajista Charles Jencks concibió en 1989 su Jardín de la Especulación Cósmica para presentar de manera artística la esencia del universo. Ocupa 12 hectáreas en Portrack House, en la región de Dumfries, al suroeste de Escocia, y no tiene una gran variedad de plantas. Lo interesante son las esculturas e instalaciones que se funden con el entorno natural según fórmulas matemáticas y principios científicos. Una cascada de agua en forma de pasos cuenta el origen y desarrollo del universo. Un pavimento ajedrezado de planchas de metal y césped reproduce el comportamiento de la materia al precipitarse en un agujero negro. Es propiedad privada y solo abre al público una vez al año, en torno al puente del Día del Trabajo, a principios de mayo.Jane Barlow (getty)