14 fotosLos otros 35 pueblos más bonitos de España (2)No forman parte todavía de la asociación que reúne a las poblaciones más espectaculares, pero deberíanElena Sevillano17 nov 2017 - 15:23CETWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceA la capital de la pequeña isla canaria de La Graciosa solo se puede llegar desde Órzola, en la vecina Lanzarote. Puerto pesquero con casitas blancas, calles de arena, ritmo tranquilo, atardeceres espectaculares y una gastronomía a base de pescado fresco. Caleta del Sebo cuenta con una iglesia dedicada a Nuestra Señora del Carmen, también llamada Virgen del Mar, que es la patrona. No tuvo electricidad hasta 1990.iStockUna sencilla lápida en el cementerio de Deià reza: Robert Graves. Poeta. El escritor inglés quedó fascinado por este pueblo mallorquín de la sierra de Tramontana, entre Valldemossa, Sóller y Bunyola, y vivió en él durante casi medio siglo, en su casa de Can Alluny, hoy convertida en museo. Sus calles empinadas, trazadas durante la dominación musulmana de Mallorca, trepan hacia la iglesia parroquial, en la cima de un monte, sobresaliendo por encima del resto de edificios.Mark Bolton (Corbis)Da vértigo observar el perfil de las casas y la iglesia de Castellfollit de la Roca (Girona) asomándose al borde de una espectacular pared basáltica de 50 metros de altura. Sobre ella se asienta este pueblo de unos mil habitantes y menos de un kilómetro cuadrado de superficie (es, de hecho, uno de los municipios más pequeños en extensión de Cataluña), limitado por la confluencia de los ríos Fluvià y Toronell.Cristian Baitg (Getty Images)Municipio en la zona del Collsacabra formado por dos poblaciones que fueron independientes hasta 1977: Pruit, un conjunto de masías diseminadas, y Rupit, núcleo urbano que conserva todo su encanto medieval, con casas de arquitectura románica y calles de piedra, considerado uno de los pueblos más bonitos de Cataluña. El visitante podrá disfrutar de los puentes, las iglesias (entre ellas la románica de Sant Joan de Fàbregues), el salto de agua de Sallent o el monumento natural de Agullola.Jack F. (Agefotostock)Fundada hacia 1404 por Jean de Betencourt, la ciudad más antigua de Fuerteventura, y su capital administrativa hasta 1834, es hoy la villa menos poblada de la isla. Betancuria no tiene playa ni infraestructuras turísticas, pero su interés histórico y artístico la convierte en visita recomendable. Su iglesia de Santa María, del siglo XV, fue destruida por los piratas berberiscos en el XVI y reconstruida en el XVII.Markus LangeTradición marinera y un precioso puerto pesquero en el Occidente asturiano. Cudillero, o Villa Pixueta, como se le conoce, combina una arquitectura popular muy adaptada al paisaje, con el colorido caserío formando una especie de anfiteatro frente al mar, con un lujoso palacio del siglo XIX como es la Quinta de Selgas, con amplios jardines y cuadros de Goya.Getty ImagesMogrovejo es una pequeña aldea del valle de Liébana, a los pies del macizo oriental de Picos de Europa, encaramado en un llano a 460 metros de altitud sobre el nivel del mar, y rodeado de bosques. Fue declarada de interés histórico y cultural por su conjunto de casonas de los siglos XVI y XVII, de sillería y mampostería, con balconadas de forja, y algunos edificios singulares, como la torre medieval de finales del siglo XIII.Getty ImagesUn buen plan para visitar Sigüenza (Guadalajara) es pasear sin rumbo por sus calles, repletas de edificios civiles y religiosos de gran belleza, sin perder de vista sus tres grandes puntos cardinales: el castillo (actualmente Parador de Turismo), la Plaza Mayor de estilo renacentista y la catedral, que empezó siendo románica (se inició en el siglo XII) aunque su interior destaca por su aspecto gótico, y donde se guarda un cuadro de El Greco y la soberbia tumba gótica del Doncel de Sigüenza, de finales del siglo XV.José Antonio Moreno (Agefotostock)Situado sobre un meandro del Guadalquivir, sus características casas blancas escalan el cerro ordenadas en calles radiales que desembocan en la plaza de España, a la que se asoma la iglesia de San Bartolomé. El puente sobre el río, la Casa de las Tercias o la Torre de Villaverde son otros alicientes de Montoro (Córdoba).José Fuste Raga (Agefotostock)Defiende con orgullo ser aquel lugar de la Mancha de cuyo nombre Cervantes no quiso acordarse, la primera frase del Quijote. Villanueva de los Infantes, en el centro del Campo de Montiel, atesora edificios civiles y religiosos, casas populares y palacios, y una de las plazas mayores más bellas de Ciudad Real. Conjunto representativo del barroco y del renacimiento manchegos, en su iglesia parroquial de San Andrés Apóstol (siglo XVI) fue enterrado Quevedo.Ana del Castillo (Agefotostock)Pasear por Peratallada (Girona), uno de los núcleos de arquitectura medieval más importantes y mejor conservados de Cataluña, en la Costa Brava, es como viajar a la Edad Media. La población fue creciendo en torno a su castillo, del siglo X. Y atesorando monumentos de interés como la iglesia de Sant Esteve de Peratallada (principios del siglo XIII), la Torre del Homenaje o el palacio de Peratallada (siglo XIV).AgefotostockVilla y Puerto fundada a finales del siglo XV por un banquero genovés, Garachico (en la isla canaria de Tenerife) renació de sus cenizas, literalmente, tras la erupción del volcán de Trevejo, que lo devastó en 1706. Posee un rico patrimonio arquitectónico y una bien conservada muestra de arquitectura tradicional canaria. Calles adoquinadas, iglesias y las piscinas naturales de El Caletón. Frente a su costa se alza un imponente roque.Peter Thompson (Getty Images)Intramuros conviven en armonía el románico, el gótico y el barroco, en callejuelas de trazado medieval. Fuera del recinto amurallado, un conjunto de masías dispersas, algunas fortificadas. El casco histórico de Pals (Girona) se levanta sobre una colina rodeada de llanuras. En su ascenso, el viajero descubre la Torre de las Horas (torre románica circular) o la iglesia de de Sant Pere, hasta llegar al mirador del Pedró.Alex Salcedo (iStock)El término municipal se extiende por la franja central de Lanzarote, de costa a costa, incluyendo el archipiélago Chinijo. En el centro, la villa de Teguise, conocida popularmente como la Villa, capital de la isla hasta que ésta se trasladó a Arrecife. Con su castillo de Santa Bárbara (siglo XVI), hoy Museo de la Piratería; la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe (siglo XVI); conventos que son ejemplo de arquitectura religiosa canaria del XV y XVI; y La Cilla, el granero más importante de Lanzarote.Tuul & Bruno Morandi (Corbis)