Nostalgia del Madrid punk

La fotoperiodista Mariví Ibarrola ha publicado Yo disparé en los 80, un libro con aires de fanzine punk que incluye 89 de sus fotografías. Recorremos las calles de Madrid en busca de la movida perdida.

¿Qué pasaba en los ochenta en los alrededores de la Gran Vía?

De todo, pero siempre relacionado con el rock. Si no sonaban The Clash, Television, Burning, The Doors, Rolling Stones, The Kings o Chuck Berry no íbamos.

¿Se mantiene esa esencia?

Creo que no, pero si tuviera que buscarla primero iría a Malasaña. Luego pasaría por Argumosa, en Lavapiés, donde se respira un espíritu callejero semejante al de la época. Y asistiría a un buen concierto en el Hebe, en Vallecas. Madrid es muy de barrios, cada uno tiene su estilo y su bar oscuro y canalla; La Coquete, en Ópera, es uno de estos.

¿Dónde conseguía la ropa?

Iba a comprar al Rastro. Por aquel entonces era un mercadillo de verdad, buscaba ropa vieja, esa que ahora se llama vintage: vestidos negros, mallas de los setenta, pitillos...

Parece que describe la estética de una tarde en Malasaña.

Dos de Mayo ha cambiado, pero está en auge. Al ver el barrio reconozco el estilo, aunque siento que ha perdido su alma. No me parece grave. Los barrios hay que vivirlos y disfrutar su evolución; en eso consiste el tiempo.

¿Salimos esta noche?

Con buena compañía, salgo por cualquier sitio. Pero antes de perdernos en un tugurio pasaría por La Vía Lactea, por el Siroco, una copa en el Café La Palma y un baile en la sala El Sol.