A flor de piel

Fotografía: Leandre Escorsell | Estilismo: Anna Vallès

Fabio Bartolomei, hacedor de uvas y vinos, facilita una comunicación única entre sus viñedos y la sensibilidad del bebedor. Una copa para conocerse.

DAVID FOSTER WALLACE cuenta la historia de dos peces jóvenes que no se dan cuenta de la temperatura del agua hasta que un pez mayor les pregunta: “¿Cómo está el agua, chicos?”. Fabio Bartolomei, vitivinicultor nacido en Italia y educado en Escocia, recorre los viñedos cercanos a Madrid (desde Carabaña hasta El Tiemblo) como ese pez experimentado que conoce, disfruta y transmite los detalles de la obviedad: hay que observar con ojos de estupefacción la naturaleza hecha viñedo; hay que trabajarla con las manos para sentirla y hay que saber trasladarla a la botella con la mínima intervención. Su ...

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DAVID FOSTER WALLACE cuenta la historia de dos peces jóvenes que no se dan cuenta de la temperatura del agua hasta que un pez mayor les pregunta: “¿Cómo está el agua, chicos?”. Fabio Bartolomei, vitivinicultor nacido en Italia y educado en Escocia, recorre los viñedos cercanos a Madrid (desde Carabaña hasta El Tiemblo) como ese pez experimentado que conoce, disfruta y transmite los detalles de la obviedad: hay que observar con ojos de estupefacción la naturaleza hecha viñedo; hay que trabajarla con las manos para sentirla y hay que saber trasladarla a la botella con la mínima intervención. Su Alba 2018 está lleno de caricias y amabilidad en una senda de austeridad y de frescura otoñal. Los hollejos de la uva se reflejan en la piel del membrillo. Pelusa y la carne cruda del fruto. Gránulos de pera limonera y aromas de humus en la profundidad de la copa. Sol tardío. Orégano en flor y mimosa. Galletas de jengibre y bizcocho de limón. Las manos desmenuzan levadura fresca. 

Ficha técnica

Vinos Ambiz, Alba 2018.

– Producido en España, El Tiemblo (Ávila), 12,5%. Viñedos en la sierra de Gredos sobre suelo granítico con vetas de cuarzo son trabajados sin química y a mano. La uva blanca, albillo real, empieza a fermentar con hollejos, es prensada y termina en acero. Una trasiega a tinajas viejas de barro y cinco meses de reposo en ellas. Estabiliza y filtra el frío. No hay sulfitos añadidos. Precio: sobre los 19 euros.

Sensaciones

– Sus aromas son limpios y precisos. Parecen dibujados en una lámina de cielo tras el paso de la tramontana. Sabores de la sierra alta.

A través del cristal

– Tabla de madera y servilleta de lino, ambas de Zara Home. Copa para Merlot de Zwiesel 1872.

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