La medida estrella de Manuela Carmena cierra al tráfico un área de 472 hectáreas en el centro donde solo podrán circular residentes y transporte público. En la foto, dos carteles de Madrid Central a la altura de Gran Vía.ULY MARTINLos no residentes podrán acceder a las zonas de Madrid Central siempre que tengan etiqueta ambiental y vayan a un parking de uso público. En la imagen, los vehiculos en la calle Alcalá acceden a La Gran Vía desde Cibeles.ULY MARTINEl Ayuntamiento ha instalado señales y pictogramas en la calzada para saber que zonas delimitan Madrid Central. Una señal de Madrid en la Calle Lope de Vega.ULY MARTINLa medida, que arranca este viernes en fase informativa, da de plazo hasta febrero para que los conductores se adapten a las restrcciones de circulación. Hasta entonces todos los vehículos no autorizados que accedan a Madrid Central serán apercibidos. En la imagen, automóviles y peatones cubren la Gran Vía, un día antes de la entrada en vigor de Madrid Central.ULY MARTINLa iniciativa espera reducir un 40% la emisión de contaminantes en el área. En la foto, un vehículo se para frente a un paso peatones en la Carrera de San Jerónimo.ULY MARTINDesde su puesta en marcha, y durante dos meses, los accesos estarán controlados por agentes de Movilidad. En la imagen, dos agentes regulan el acceso al tráfico en la Glorieta Emperador Carlos V, en la Zona de Atocha.ULY MARTINTranscurridos los dos primeros meses el control será automático con cámaras de seguridad. En la imagen, una cámara de seguridad instalada en Paseo del Prado.ULY MARTINPara testar el funcioanmiento de las cámaras, durante otro par de meses se enviarán notificaciones de las sanciones, pero tampoco se cobrarán. En la foto, un autobús Turistico accede a Paseo del Prado a la altura de Neptuno.ULY MARTINEn el suelo las líneas rojas serán las encargadas de delimita el perímetro de 10 kilómetros de la zona afectada. En la imagen, dos líneas rojas en la calle Lope de Vega.ULY MARTIN
