Pramodini Roul, de 24 años, sobrevivió a un ataque con ácido y ahora trabaja en Chhanv, una ONG que apoya a las víctimas de ataques con ácido. Su pareja, Saroj Sahoo, de 26, es un directivo de Chhanv. Ambos posan en "Sheroes", un hogar para las víctimas de ataques con ácido en Noida (India), el 8 de febrero de 2018. La pareja se conoció en el hospital cuando Pramodini se recuperaba de sus quemaduras en 2014. "En septiembre de 2017, tras una operación del ojo, estaba volando con Saroj y de pronto empecé a ver las cosas nítidamente. Era la primera vez que veía el rostro de Saroj, nunca imaginé que podría ver a Saroj en mi vida", dice Pramodini.SAUMYA KHANDELWAL (REUTERS)Alejandra, consultora de política educativa de 44 años y Razhy, periodista y activista de derechos humanos, de 48 años, posan en una calle del barrio de Coyoacan en Ciudad de México, el 9 de febrero de 2018. La pareja se conoció en Ciudad de México en 1998 después de que Razhy fuera secuestrado y dejara su trabajo como director de una revista semanal en Oaxaca. Meses después Alejandra viajó a Europa a estudiar. "Me fui a estudiar a Francia, cuando volví al país todo se volvió frío, mi familia no aceptaba nuestra relación. Al final, 4 años después, ninguno tenía pareja y decidimos reencontrarnos. Nos casamos en el barrio de Coyoacan, donde paseamos y nos volvimos a ver después de tantos años" cuenta Alejandra. Durante el terremoto del 19 de septiembre de 2017 el apartamento de la pareja resultó dañado, "nuestra casa sufrió daños por el terremoto, ahora tenemos que vivir en otro apartamento y estamos esperando la autorización para arreglar los daños y poder volver" dice Razhy. La pareja tiene un hijo de 9 años.EDGARD GARRIDO (REUTERS)Jenny Ostrom, directora de fotografía de 37 años y su marido, Chad Ostrom, director también de 37 años, posan en McCarren Park, cerca de su casa en Brooklyn el 8 de febrero de 2018. "Nos conocimos el primer día de universidad en Kansas. Mis amigos y yo pensamos que estaría bien ayudar a las chicas de primer año a llevar las cosas a sus habitaciones y allí estaba Jenny, abriendo cajas con su familia. Como en una película, pasé por delante de su habitación, me paré y volví para entrar. Después de vivir en tres estados, mantener la relación a distancia, momenos buenos y momentos malos, 19 años después compartimos una casa, una niña y una vida" dice Chad.LUCAS JACKSON (REUTERS)Noor Djait, una arquitecta de 31 años e Ismail Benmiled, un empresario de 36, posan junto a sus hijos Said, de 3 años, y Malek, de 4 meses, en su casa de Túnez el 9 de febrero de 2018. La pareja vivía en la misma calle y fueron al mismo colegio cuando eran niños pero no se hicieron íntimos hasta que coincidieron en una discoteca cuando ella tenía 17 años. "Esa noche fue la primera vez que realmente tuvimos contacto visual, la primera vez que hablé con él. Recuerdo que me quité los zapatos para bailar en la mesa. Al final de la noche sólo encontré uno, Ismail encontró el otro. Me lo trajo dos días después, como en Cenicienta". Empezaron a salir pero a ella le preocupaba la diferencia de edad y rompieron, pero Ismail insistió y mantuvo el contacto hasta que fue a Roma años después, donde ella estaba terminando sus estudios de arquitectura y le propuso matrimonio poco después. "Llevamos casados 6 años, tenemos dos niños y nuestro amor no ha cambiado un ápice. Estamos tan enamorados como al principio" dijo Noor.ZOHRA BENSEMRA (REUTERS)Haidar Ali Moracho y Coral Ibáñez Blanco, de 20 y 23 años respectivamente, posan en el Campo del Moro en Madrid (España), el 7 de febrero de 2018. Haidar es un joven trasgénero que estudia su segundo año del Grado en Estudios Asiáticos y Africanos en la UAM, y Coral está buscando trabajo, llevan saliendo 7 años. "Un amigo me dijo que había una chica a la que le gustaba Vegeta, de Bola de Dragón, y que quería convertirse en un chico. Nos puso en contacto de forma virtual y estuvimos hablando durante todo un año por videoconferencia hasta que conseguimos quedar en persona en Madrid" dice Coral. "Tenía muchas ganas de darle un beso, pero los padres de su amigo estaban con nosotros y me contuve", cuenta Haidar. "Tuvimos que estar unos pocos meses más antes de que me invitara a su casa y estuvimos los siguientes cinco años viéndonos en secreto durante convenciones del Japan Weekend" explica Coral. "Fue muy duro. Hubo momentos en los que pensé que sería menos doloroso si lo dejásemos, pero no podía hacerlo. Juntos hasta que la muerte nos separe" dice Haidar. "Hemos pasado cosas muy difíciles juntos, pero ahora siento que podemos enfrentarnos a cualquier cosa y a cualquier persona, nadie puede acabar con nosotros" asegura Coral. Los dos son aficionados a la historia y les encanta pasar tiempo juntos en los jardines de Campo del Moro, cerca del Palacio Real. "Este lugar significa mucho para nosotros, aquí nos sentimos libres" dice Coral.
SUSANA VERA (REUTERS)Tony Wakaiga, estudiante de Arte y Diseño y Suzzy Konje, estudiante de Turismo, ambos de 18 años, posan tras una cita en Nairobi (Kenia), el 11 de febrero de 2018. Tony conoció a Suzzy en una sesión fotográfica en Banda Street y pronto empezaron a salir, "hemos sido muy buenos amigos mucho tiempo y nuestra pasión por el otro ha madurado como el vino. Este San Valentín tengo una sorpresa especial para Suzzy que hará que se le salga el corazón" dijo Tony.THOMAS MUKOYA (REUTERS)Cathal King, veterinario de 31 años y Jessica O'Connor, estudiante de 28 años de último año de veterinaria en Budapest (Hungría) posan junto a sus perros en la playa de Rossbeigh (Ireland), el 4 de febrero de 2018. Nos conocimos jugando al Rugby en Killarney, los dos somos personas muy activas, nos gusta la aventura, las carreras, el senderismo y nos encanta viajar. Llevamos juntos tres años y medio. Yo crecí aquí en Rossbeigh, por eso estamos aquí" cuenta Cathal. CLODAGH KILCOYNE (REUTERS)Kathriel Zambrano (i), de 23 años y Yohanna Gonzalez (d), de 28, posan frente al bar El Molino, el 9 de febrero de 2018, el lugar donde se conocieron en Caracas (Venezuela). Yohanna trabajaba en el bar en el evento 'InkFest' haciendo piercings mientras Kathriel se hizo un tatuaje en el stand de enfrente. "No presté mucha atención porque, en ese momento, yo estaba con otra persona" dijo Yohanna. Él no paraba de mirarla e intentó hablar con ella, "cuando lo vi me impresionó porque tiene unos ojos muy grandes y de un color impresionante, pero nada más, me marché pronto". Un día él la escribió para preguntar qué hacía y si podía ir a verla. "Me compró una botella de anís pero le dije que no bebía, que podía comprarme chocolate si quería". Un día ella llegó a casa y "en mi cama había una bolsa con maquillaje, un collar y un libro que decía '¿quieres ser mi novia? y ahí es cuando empezamos...". Han estado juntos 5 meses desde entonces, "un día él me preguntó si quería empezar algo realmente serio con él, yo dije que sí, que quería estar con él para siempre. Entonces, él se arrodilló, sacó un anillo y me pidió matrimonio. Yo me empecé a reír porque me puse muy nerviosa". Ahora están prometidos, "no llevamos mucho tiempo juntos pero realmente sentimos que nos conocemos de toda la vida, la química que hubo al principio fue impresionante" dijo Yohanna. CARLOS GARCIA RAWLINS (REUTERS)Rute Magalhaes, de 33 años y Filipe Alves, de 38, posan para un retrato en su estudio de Lisboa (Portugal), el 8 de febrero de 2018. "Nos conocimos hace 12 años por Internet. La fotografía nos unió y nos enamoramos. Entonces creamos un estudio para ayudar a otra gente a enamorarse de la magia de la fotografía" dice Rute.RAFAEL MARCHANTE (REUTERS)Huang Chenfeng (d) y su marido, Zheng Dingguo, ambos de 63 años, posan en el Centro Universitario Fudan contra el Cáncer de Shanghai, el 6 de febrero de 2018. Huang ha estado cuidando de su marido desde que le ingresaron en el hospital para recibir tratamiento, la pareja se casó en una boda acordada por sus familias en 1972.ALY SONG (REUTERS)Oladipupo Baruwa, de 45 años y Funke Baruwa, de 43, posan en su casa de Abuja (Nigeria), el 9 de febrero de 2018. "Bueno, él es persistente. Nos conocimos en la iglesia en la misa del primer domingo del año 2000 y me siguió a casa después de cada misa desde ese día durante dos años. Me encantó su insistencia y que no se diese por vencido" dijo Funke. Tras el nacimiento de su primera hija en 2013 la pareja hizo acordó que pasara lo que pasara lo enfrentarían juntos. "Para mí siempre ha sido el factor unificador, el matrimonio es un compromiso y cuando estás dispuesto a trabajar duro, mejora".AFOLABI SOTUNDE (REUTERS)Aviva Ephrati (i), profesora de educación infantil retirada de 84 años e Israel Ephrati (d), supervisor universitario jubilado de 87, posan en el salón de su casa en Kfar Saba, al norte de Tel Aviv (Israel), el 8 de febrero de 2018. La pareja gestionó una galería de arte durante algunos años. Han estado casados 64 años. "En 1950 conocí a Israel por accidente, entonces él era soldado y yo estaba intentando quitarme de encima a otro chico que quería salir conmigo una tarde en Jerusalem. Después de que el chico se fuera, Israel me pidió salir y yo lo rechacé, quería ser su amiga pero no quería nada romántico. Durante los siguientes cuatro años casi me caso con un chico que desapareció dos semanas antes de la boda después de que su padre le diera un ultimatum tras descubrir que mi padre no era judío de nacimiento. Durante esos años Israel siguió mandándome cartas por Año Nuevo y viendo si estaba bien. Tardé cuatro años en enseñarle esas cartas, que aún conservo, a una amiga que me dijo que era estúpida si no me iba con él. Llevamos casados 64 años, tenemos tres hijos y hace unos meses nació nuestra primera nieta", cuenta Aviva.NIR ELIAS (REUTERS)
