12 fotosLas fotos más tristes de gente celebrando la LoteríaQue te toque el primer premio de la Lotería es genial. Lo malo es te hacen fotos. Te mostramos algunas de las más hermosamente raras 22 dic 2017 - 13:36CETWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceHay parejas que ya no se rozan. Novios que ignoran a sus novias y viceversa. Personas que ni siquiera ven las mismas series y lo más romántico que planean es pasar un día con su marido/mujer en el centro comercial (o el outlet). Estos dos tortolitos no. Aquí hay tomate, untado en euros.Tiene todos sus discos en casete y en elepé: Coco, piña, coco, limón, La estufita, Bailes de salón, Cutre-Lux, Contrabando y traición, Glam zelestial, Navidades a GoGó... Con lo que se ha llevado al ganar El Gordo se comprará un crucero en el que viajarán únicamente su familia, dos amigos y Paco Clavel haciendo un concierto continuado las 24 horas del día durante la duración del viaje.En Eyes Wide Shut se celebraban unas reuniones en las que todos retozaban con todos cubriendo sus rostros con máscaras venecianas. Estas dos mujeres intentaron acceder pero olvidaron la contraseña y decidieron aprovechar el atuendo para fingir que les había tocado la lotería navideña.Llueve. Hace frío. No sé quién es ese tipo vestido de naranja. Se me ha derramado el cava barato del vaso. Me arrepiento desde hace 48 años de haberme casado con mi mujer en lugar de con su hermana. En este pueblo jamás sucede nada emocionante. Odio ser pastor de ovejas. Por lo tanto, ¿puede alguien decirme de qué se ríe toda esta gente?El parecido con las personas reales es increíble.Una camiseta de Rock n' Retro es lo más juvenil que se ha visto en esta localidad premiada con El Gordo. Desde hoy, los únicos cuatro menores de sesenta años se van con su dinero a la gran ciudad y dejan atrás para siempre el cartel de "Local Climatizado".Estar muy contento porque el azar te ha bendecido con su gracia, desafiando las matemáticas y todas las leyes posibles de la probabilidad. Ser millonario al instante y sin esfuerzo. Poder pagar todas tus deudas de una tacada y planear una vida de lujo y confort. Pero espera, no celebremos todavía. Vamos primero tranquilamente a una tienda de serigrafía a que nos hagan una camiseta diciendo que el primer premio se vendió aquí.Vale, soy solo un neonato, y aún así sé que mi familia no es la mejor del mundo. Bajan cada día al bar del barrio con la ilusión de quién viaja a Japón y son poco ambiciosos a la hora de pedir refigerios. Pero son felices. Y asquerosamente ricos.Hace cinco años que le tocó El Gordó y sigue saliendo todos los fines de semana -tres días seguidos- sujetando un cartel con el décimo premiado. Se ha gastado todo y ahora en los bares le fían y en los 'afters' le temen. No, es broma, pero ¿a qué sería divertido?Mi abrigo me delata. El Gordo son migajas para mí. Estoy deseando volver a mi casa y perder de vista a toda esta gente qye se emociona por un puñado de millones de euros. Dientes, dientes.Que alguien descuelgue ese cartel de la pared, por favor. Gracias.Ni fofisano, ni rellenito... GORDO, con mayúsculas. Ha llegado el momento de reivindicar la lorza, el sedentarismo y la mala salud alimenticia para cumplir con el cliché de nuevo rico. ¿Quién se ríe ahora, eh? Este tipo tiene pasta suficiente como para hacerse todo el cuerpo de nuevo, con sus abdominales y sus músculos y sus de todo.