El avión aterrizó en Sevilla el pasado viernes 24 de julio proveniente de Nueva York en un vuelo sin escalas de 71 hora. En la fotografía, placas solares que cubren la superficie del aparato.PACO PUENTESLa empresa Covestro se ha encargado de los materiales que complementan la cabina. El reto para reducir al máximo el gasto de energía era conseguir que fuese lo más liviana posible para el avión, que pesa 2,3 toneladas. En la imagen, varios ingenieros trasladan la parte externa de la cabina, la cual se monta y desmonta manualmente.PACO PUENTESCon la parte externa de la cabina desmontada, se pueden apreciar todos los cableados eléctricos.PACO PUENTES“En la parte exterior de la cabina no hemos usado metal, en su lugar colocamos poliuretano rígido, un material que se encuentra en los frigoríficos y que funciona como un buen aislante térmico. Cuando utilizamos materiales basados en derivados del petróleo esperamos que el producto ahorre tanto como 70 veces el carbón utilizado para hacerlo”, detalla Richard Northcote, director de sostenibilidad de la empresa. En la foto, varios ingenieros montan de forma manual la parte externa de la cabina, debido a su poco peso y ligereza.PACO PUENTESEl parabrisas es de policarbonato. “El vidrio es más pesado y el policarbonato permite la misma calidad visual, pero es más ligero. Es una oportunidad para las ventanas de la industria automovilística”, añade Norhcote. En la foto, los ingenieros terminan de montar de forma manual la parte externa de la cabina del avión.PACO PUENTESUn ingeniero toca varios botones de control en el interior de la cabina de vuelo del avión.PACO PUENTESEl piloto del 'Solar Impulse 2', André Borschberg, saluda a los asistentes antes de subir a la cabina y partir hacia El Cairo, esta mañana.PACO PUENTESTras más de quince días en la capital andaluza, el 'Solar Impulse 2' ha despegado a las 6:18 de este lunes con destino a El Cairo.PACO PUENTESEl 'Solar Impulse 2' realiza el despegue desde el aeropuerto de San Pablo, en Sevilla, destino El Cairo.PACO PUENTES
