La mansión de Playboy sale a la venta por 185 millones

Playboy Enterprises anunció la salida al mercado de la mítica mansión Playboy por 200 millones de dólares (185 millones de euros). Aunque eso no significa que se acaben sus fiestas. La casa sale a la venta con una condición: Hugh Hefner, su residente desde hace más de 45 años, seguirá viviendo allí y los potenciales compradores no podrán visitar el único rincón vedado al público, su dormitorio.

Situada en las colinas de Los Ángeles, cerca de Beverly Hills, Hefner la adquirió, tras el éxito de su revista, en 1971 por un millón de dólares. La propiedad tiene 20.000 metros cuadrados, 29 habitaciones, cuarto de juegos, una sala de cine donde todos los domingos invitaba a amigos famosos, una bodega y varias piscinas. La más famosa de todas ellas es la gruta, donde los invitados se encontraban con las conejitas.

Fiestas y desmanes

La propiedad, además, tiene licencia de zoo. En sus mejores años, Hefner tuvo animales exóticos correteando por los jardines, que también han sido escenario de las sonadas fiestas que Hefner, de 89 años, lleva celebrando desde hace casi medio siglo y por las que han pasado desde Elvis Presley hasta Jack Nicholson o Groucho Marx. Una de las anécdotas más famosas fue la que protagonizó John Lennon en los años setenta cuando, borracho, descolgó un cuadro de Matisse y le prendió fuego. A Lennon no le echaron, y el cuadro —que se salvó— sigue colgado.

La venta de la propiedad llega solo un mes después de que Playboy publicase sus últimos desnudos. La despedida la protagonizó Pamela Anderson. El pasado octubre, Scott Flanders, el consejero delegado de la publicación, comunicó que el cambio se debía a la pérdida de cuota de mercado y a la imposibilidad de vencer a Internet. Flanders ha dicho ahora que la venta de la casa ayudará a la revista a salir a flote, mientras Hefner sigue disfrutando de su “centro creativo”. Sin embargo, según la web TMZ, expertos inmobiliarios no creen que pueda llegar a venderse por 185 millones. Es un precio elevado de entrada, incluso para las residencias de lujo de la zona y, además, en la últimas fotografías publicadas la mansión parece estar en mal estado.