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Juzgan a un hombre por defender su plantación de marihuana a tiros

El supuesto ladrón intentó saltar la valla de la casa para llevarse algunas plantas

El Ministerio Fiscal ha solicitado hoy 12 años de prisión para Marcelino C.F., un vecino de Penelles (Lleida) acusado de disparar y herir al supuesto ladrón que había entrado en su casa con la intención de robarle algunas plantas de marihuana que cultivaba en el patio de su vivienda, situada en la pedanía de Almassor.

El acusado ha compartido banquillo con la víctima, Pere G.G., para quien se ha solicitado una pena de un año y nueve meses de prisión por tentativa de robo con fuerza. Los hechos se produjeron la madrugada del 15 de octubre de 2010, cuando Marcelino C.F., harto de que le robaran la marihuana, decidió realizar vigilancias nocturnas en la plantación armado con un revólver para el que no tenía licencia de armas.

El acusado ha declarado que esa noche, cuando estaba apostado en un rincón de la finca, observó que alguien trataba de saltar la valla y efectuó un disparo intimidatorio desde una distancia de entre cuatro y seis metros, con la mala fortuna de que la bola de plomo rebotó en algún lugar del cercado y alcanzó al intruso en el cuello. Mientras que el agresor y la víctima han ofrecido versiones discordantes sobre cómo sucedieron los hechos, la fiscal ha mantenido la acusación contra el primero por los delitos de tentativa de homicidio, contra la salud pública y tenencia ilícita de armas al considerar que no disparó al aire, sino a la silueta de la persona que quería robarle la droga.

Pere G. ha declarado que en ningún momento intentó superar la valla y que estaba en la calle cuando recibió el tiro en el cuello. Los forenses han ratificado que la víctima presentaba una herida por arma de fuego en la región cervical anterior que le produjo un edema, parálisis de una cuerda vocal e insuficiencia respiratoria aguda. La lesión era de tal gravedad que hubiera podido fallecer si no hubiera recibido asistencia médica. El herido precisó de tratamiento quirúrgico, estuvo 100 días de baja y sufre unas secuelas físicas que la fiscal ha valorado en 5.000 euros.

Los Mossos d'Esquadra que realizaron el atestado del incidente han confirmado que en el registro de la vivienda del acusado encontraron gran cantidad de marihuana en todas sus fases de producción, unas balanzas de precisión y anotaciones de gramos y precios. En su alegato final, el acusado ha pedido perdón, se ha mostrado arrepentido por su acción y ha reiterado que fue un "fatal accidente". "Me has destrozado la vida", le ha reprochado la víctima instantes antes.

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