El PNV se pliega a la apuesta de BBK para su fusión con Vital

En materia de cajas en el País Vasco, Mario Fernández es la voz incontestable. Su reconocida autoridad intelectual se vio agrandada ayer cuando el propio PNV, partido político que le sustenta, tuvo que retractarse incluso de su posición contraria a la fusión fría entre BBK y Vital, después de que el presidente de la entidad vizcaína mostrara el pasado viernes su decidida apuesta por este tipo de uniones, como paso previo a otras operaciones venideras. Con su gesto, Fernández levanta el ánimo de la caja alavesa y de los dos principales rivales del PNV, socialistas y populares.

De momento, los jeltzales se apresuraron ayer mismo a recomponer su discurso en materia de cajas, muy volcado hacia la fusión de las tres entidades vascas. Andoni Ortuzar, presidente del EBB, dijo en Bilbao que su partido se siente "identificado" con el discurso de Mario Fernández, en el que se mantiene "en pleno vigor" su oferta para cerrar una SIP con Vital, que incluía una invitación a la incorporación de Kutxa. Ortuzar añadió que el PNV dará "apoyo y cobertura" a lo que los presidentes de las cajas vascas "decidan", ya que los partidos políticos "no son los protagonistas" de un proceso de fusión.

Uno de ellos, Carlos Zapatero (Vital), en el mismo mitin del PSE-EE, vio reforzada su apuesta que se antojaba apartada desde que el PNV puso su veto. Zapatero insistió en que la fusión fría de las tres cajas de ahorro vascas "no es un camino, sino el camino" y que desde la entidad que preside "no hay ningún inconveniente en seguir avanzando" en este sentido.

A nivel político, PP, principalmente, y PSE-EE se sienten más fuertes para mantener sus actuales posiciones. Los populares porque ya han informado de su apuesta por la fusión fría a tres. Al secretario general del PP de Álava, Javier De Andrés, le agrada que BBK "no se sume a la consigna política del PNV" y que así pueda salir adelante la fusión fría con Vital.

Con mayor intencionalidad política, Txarli Prieto entiende que la apuesta de Mario Fernández "en un alarde de sinceridad" refleja que la fusión caliente "es absolutamente inviable, y así golpea la posición del PNV, mientras ave "posible" la fusión fría, en línea con las tesis de los socialistas vascos.