El Gobierno central y la Generalitat escenifican una tregua y pactan tres transferencias

El Gobierno central y la Generalitat se han dado esta mañana una pequeña tregua en la dura pugna por la financiación autonómica al pactar definitivamente tres traspasos de competencias establecidos en el Estatuto. La Comisión Mixta de Transferencias, en la que participan ambos gobiernos ha acordado el traspaso a Cataluña de las competencias en gestión del litoral, homologación de títulos extranjeros no universitarios y comunicaciones electrónicas. Los tres traspasos ya se habían acordado en enero, pero faltaba concretar la transferencia presupuestaria y de personal a la Generalitat, detalles que hoy han abordado la ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, y el consejero de Interior y Relaciones Institucionales de la Generalitat, Joan Saura.

Además, se ha acordado la ampliación de medios económicos y materiales en Justicia y obras hidráulicas, concretamente para la reutilización del agua efluente de la depuradora del Llobregat.

A vueltas con el traspaso de Cercanías

Al término de la reunión, la ministra Salgado se ha mostrado satisfecha por los acuerdos ante un consejero Saura muy crítico con la "lentitud" en que, a su parecer, se está desarrollando el Estatuto catalán. Y es que además de las tres competencias hoy transferidas hay otras dos que también se acordaron en enero pero que no se han transferido finalmente por problemas diversos. Éstas son la gestión de becas y la inspección de Trabajo.

La reunión de hoy es previa a la que mañana celebrará la Comisión Bilateral Estado-Generalitat, de contenido más político, y que debe abordar otros tres importantes traspasos pendientes. El más relevante es la gestión de Cercanías por parte de la Generalitat, sobre el que no hay acuerdo pese a haberse retrasado ya más de siete meses.

Los traspasos suponen una dotación presupuestaria de 3,8 millones de euros.