Zapatero dice que España elige entre "un gobierno para creer o para temer"

José Luis Rodríguez Zapatero ha aprovechado el mitin de anoche en A Coruña para subrayar las profundas diferencias que a su juicio separan su proyecto para España del diseñado por Rajoy. Un mensaje dirigido a la bolsa de indecisos que aún no ha decidido su voto para el próximo 9 de marzo, cuando España, según el presidente del Gobierno, elegirá entre un gobierno "para el acuerdo o para la discordia, un gobierno que respete a todos o que desprecie a muchos, un gobierno para creer o para temer".

Durante un mitin en el Palacio de los Deportes de Riazor, Zapatero ha sacado a relucir la crispación que ha caracterizado la oposición del PP estos últimos cuatro años, convencido de que muchos ciudadanos rechazan ese tipo de actitudes en política. Las elecciones, ha clamado, las ganarán "quienes no insultan, quienes creen en España, en el futuro y quienes están dispuestos a trabajar unidos en favor de todos los españoles".

Zapatero ha querido ponerse en las antípodas de su rival: "Yo creo que España está fuerte y Rajoy piensa que es débil; yo sé que crecemos y creceremos, y Rajoy piensa que estamos en la ruina; yo promoví una ley de igualdad y Rajoy la impugnó; yo creo en el futuro, y Rajoy añora el pasado", ha comparado, para advertir a continuación de que ésa es la actitud por la que hay que optar el 9 de marzo.

También ha querido desvirtuar las críticias del PP a su Gobierno, al que acusa de no ser lo suficientemente patriota. El PSOE, según Zapatero, puede decir antes, ahora y en el futuro que siempre ha sido "leal a España, que hemos puesto los intereses generales por encima de los intereses de partido, pero Rajoy no lo podrá decir", ha afirmado, tras acusarle de utilizar el terrorismo "con fines partidistas".

¡Cuánta hipocresía!

Zapatero también ha denunciado la política xenófoba que en su opinión emplea el PP en esta campaña. Una política de inmigración con graves prejuicios para los extranjeros que viven y trabajan en España, según el presidente, quien ha advertido de que detrás de ese mensaje el PP esconde "una reforma de la sanidad pública y reducir los derechos universales"

A su juicio, "quien no se ha acercado nunca ni a la emigración, ni a los inmigrantes ni al mundo del trabajo seguramente no sabe lo que representa tener que irse muy lejos de su patria para poder sacar su vida adelante".

"Éste país es un país de principios y de dignidad, y debemos tratar a quienes vienen de fuera a vivir y trabajar con nosotros igual que hemos exigido que traten a los españoles que iban fuera a trabajar", ha afirmado, antes de garantizar que mientras él sea presidente se tratará a cualquier persona en la sanidad pública "tenga el color de piel que tenga o venga de donde venga".

En este sentido, ha afirmado que "la respuesta no está en excluir a unos, echarles de los servicios sociales, sino en crear más hospitales públicos, más sanidad pública, más ayudas sociales". Además, se ha preguntado cómo los dirigentes del PP hacen este discurso sobre los inmigrantes "y luego se van a misa todos los domingos tan tranquilos". "¡Cuánta hipocresía!", ha agregado, y ha confiando en que algún obispo les eche alguna "reprimenda" por hablar de seres humanos como de "mercancías".

Zapatero ha remarcado como una de sus propuestas estrella para la próxima legislatura la aprobación de una ley contra cualquier tipo de discriminación, "leyes para integrar, para avanzar, para que todos se sientan ciudadanos de este país", igual que lo han hecho otras medidas como la ley de igualdad o de dependencia.

"Ésa es la España que tenemos por delante, la España de verdad, y no la España de la niña de Rajoy, sino la España que no se olvida de nadie", ha resumido.