Un avión carguero sufre un accidente sin víctimas en Barajas

Un avión de carga perteneciente a la compañía SwiftAir sufrió anoche un accidente, sin causar heridos, al aterrizar en una pista del aeropuerto de Barajas, según han informado fuentes aeroportuarias. Al aparato, de pequeño tamaño y que no llevaba pasaje, se le averió el tren de aterrizaje delantero en el momento de tomar tierra, por lo que se posó con el morro. Además, derrapó al aterrizar ya que, debido a las lluvias, la pista estaba resbaladiza. Se trata de la pista 33-L de Barajas, que se cierra al tráfico de pasajeros todas las noches a las 23.00 horas para evitar las molestias del ruido a los vecinos. A su hora programada, las 7.00, se ha reabierto la pista sin ningún problema, según han indicado a esta web fuentes de AENA.

Inspectores de la Dirección General de Aviación Civil (DGAC) abrirán hoy una investigación sobre las causas del accidente. Según las mismas fuentes, el avión, que tomó tierra a las 21.55 horas procedente de Vitoria, fue retirado de la pista 33 izquierda de las instalaciones a las 00.45 horas. AENA ha asegurado que el accidente del avión "no alteró la operatividad "del aeropuerto en ningún momento, ya que se produjo poco antes de que se cerrara la pista. El avión realizaba un transporte de carga para Swiftair, pero no era una aeronave de la flota de esta compañía, que realiza vuelos chárter de pasajeros y transporte de mercancías.

Los dos únicos tripulantes del avión, el piloto y copiloto, salieron del avión por su propio pie después del accidente, resultaron ilesos y no precisaron de atención médica. Sin embargo, el accidente obligó a activar el plan de emergencias del aeropuerto, en el que participaron varias unidades de la Guardia Civil, Protección Civil y bomberos, que poco antes de la medianoche trabajaban para retirar el aparato de la pista.

Una nave alquilada

Fuentes de Swiftair han indicado por su parte que la empresa había alquilado la aeronave del tipo Metro 3 a la compañía Pyrinair, con base en Zaragoza, tras la avería de uno de los aparatos de su flota. Estas fuentes han añadido que desconocen las causas del fallo del tren de aterrizaje delantero del avión y han señalado que es la compañía Pyrinair la que tendrá que determinar los motivos de la avería en la investigación de la DGAC. Tanto el piloto como el copiloto son empleados de Pyrinair.

Sobre el desarrollo de los hechos, fuentes aeroportuarias han comentado que, cuando el avión realizaba la maniobra de toma de tierra, se rompió el tren de aterrizaje delantero y el aparato recorrió varios metros sólo con el tren de aterrizaje trasero y el morro de la aeronave, hasta que se detuvo. Los tripulantes han asegurado que al sacar el tren de aterrizaje no se activó ninguna indicación que alertara de una avería. Ante este accidente el aeropuerto de Barajas activó la alerta local, situación que moviliza a bomberos, personal sanitario y Fuerzas de Seguridad del Estado destacadas en las instalaciones.

En previsión de una posible combustión, los bomberos procedieron a rociar con espuma la zona de la aeronave, además de atajar el humo que salía de uno de los motores del avión. La combustión no se produjo y a las 00.30 se iniciaron las maniobras para retirar la aeronave hacia un hangar. El aeropuerto desactivó la alerta local a las 2.15 horas y en el lugar de los hechos se realizaron trabajos de limpieza y acondicionamiento de la zona. Swiftair, una compañía aérea privada creada en 1986, se dedica al sector de operadores aéreos de carga y pasaje y cuenta con más de 400 empleados y una flota de más de 30 aviones, que incluye Boeing 727 y 737, MD83, ATR72/42, Embraer 120 y Metroliner.