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Paris Hilton, recibida en Viena con una lluvia de objetos

La heredera del imperio hotelero estadounidense ha tenido que cancelar una aparición pública para firmar autógrafos tras incidentes con el público

La heredera del imperio hotelero estadounidense Paris Hilton tuvo que cancelar una aparición pública para firmar autógrafos cuando empezaron a volar objetos sobre el escenario al que se había subido en un centro comercial de Viena.

Horas antes de participar en el famoso baile de la opera de la capital austríaca, la multimillonaria Hilton había acudido a la cita con sus seguidores en el Lugner City, un centro comercial propiedad del excéntrico constructor Richard Lugner. Este magnate vienés tiene por costumbre invitar cada año al más famoso baile de la temporada a un personaje de fama mundial, que este año ha resultado ser la joven e ingeniosa empresaria.

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Esta mujer de negocios e improvisada actriz, a juzgar por los vídeos domésticos que circulan por internet en los que se le puede ver ligera de ropa o sin ella, ha afirmado en rueda de prensa que es normal que la gente se excite cuando la ve en persona, en referencia al incidente en el centro comercial vienés.

Paris Hilton ha tenido que competir en la edición del baile de la opera para atraer la atención del público con un caballo blanco de quince años llamado Paschá, que ha aparecido en el parqué del salón principal tirando de un carruaje del que se apeará la no menos famosa soprano rusa Anna Netrebko.

Tras la cita con la música en Viena, Paris Hilton se dirigirá a la estación de esquí de Ischgl (oeste austríaco), donde familiares y amigos le ofrecerán una fiesta de cumpleaños y donde piensa esquiar, "un deporte que se me da bien", aseguró la acaudalada estadounidense.

También aprovechará para lanzar un nuevo producto con su nombre. Se trata del vino espumoso italiano enlatado, que pese a tener un ligero contenido alcohólico, no cree que perjudique su imagen, según ha explicado en una rueda de prensa en la que no se permitieron preguntas indiscretas o relacionadas con su vida privada.

Paris Hilton y su anfitrión Richard Lugner antes de la controvertida firma de autógrafos en un centro comercial de Viena.
Paris Hilton y su anfitrión Richard Lugner antes de la controvertida firma de autógrafos en un centro comercial de Viena.REUTERS

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