El Gobierno aprueba el viernes un presupuesto austero pero con menos recortes

El Gobierno aprobará este viernes los presupuestos generales de Estado para 2014, que seguirán teniendo como primer objetivo la reducción del déficit, pero que se apoyarán en unas mejores previsiones económicas, por lo que el ajuste será menor que en los dos ejercicios precedentes.

Aunque aún se están ultimando las cuentas del próximo año, el Gobierno ha descartado la adopción de nuevas medidas fiscales de ajuste, más allá del mantenimiento de las ya adoptadas, como la subida temporal del IRPF o las modificaciones en el Impuesto de Sociedades, a las que se suman el incremento del IVA.

El Gobierno cuenta con ingresar 128.159 millones de euros y se ha marcado como límite de gasto no financiero 133.259 millones, el 2,7 % más que hace un año.

La subida es consecuencia del aumento de la aportación al Servicio Público de Empleo Estatal (SPEE) y a la Seguridad Social, sin la cual el gasto no financiero disminuye el 1,3 %, hasta 104.847 millones.

En 2013, de cada 100 euros del presupuesto consolidado 53 euros se destinaron al pago de las pensiones y el desempleo, contando con una subida de las pensiones del 1 %.

Está por ver cuál será la revalorización de las pensiones en 2014, aunque el proyecto podría incorporar ya la nueva fórmula propuesta por el Gobierno en su reforma, que se tramitará en el Parlamento a la vez que los presupuestos y entrará en vigor al mismo tiempo.

De acuerdo con el nuevo índice de revalorización, lo previsible es que las pensiones suban el mínimo garantizado del 0,25 % dada la situación de déficit del sistema de la Seguridad Social, que se mantendrá al menos hasta 2016, según las previsiones del Ejecutivo.

El proyecto de presupuestos recogerá el esfuerzo en la corrección del déficit que tiene que hacer el Estado central y que pasa por disminuir el desequilibrio de la administración central del 3,8 % al 3,7 % del PIB y el de la Seguridad Social del 1,4 al 1,1 % del PIB.

El resto del ajuste para rebajar el déficit conjunto de las administraciones públicas del 6,5 % al 5,8 % del PIB dependerá de las comunidades autónomas, que tendrán que recortarlo del 1,3 % al 1 %, en tanto que los ayuntamientos se espera que continúen en equilibrio igual que lo previsto para este año.

De esta forma la administración central y la Seguridad Social asumen una reducción del déficit de cuatro décimas del PIB, que equivalen a alrededor de 4.000 millones.

De las grandes partidas se recortará el gasto disponible de los Ministerios un 0,7 %, hasta 36.042 millones, y se sabe que habrá un esfuerzo en investigación, desarrollo e innovación (I+D+i), según dijo el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, tras los graves problemas de financiación que ha afrontado este año el Centro Superior de Investigaciones Sociológicas (CSIC).

Aún se desconoce qué ocurrirá con el salario de los trabajadores del sector público, aunque es previsible que se mantenga congelado después de haber recuperado en 2013 las dos pagas extra, tras suspenderse la de diciembre de 2012.

Los presupuestos se sustentarán sobre un cuadro macroeconómico que será revisado al alza, ya que el Gobierno espera que la economía crezca por encima del 0,5 % y que la tasa de paro baje alguna décima más respecto al 26,7 % inicialmente pronosticado para 2014.