El Gobierno colombiano lanza un pacto agrario para sacar del abandono al campo

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, afirmó hoy que el país necesita una política agropecuaria moderna y equitativa para poder desarrollar el campo, al constituir un pacto nacional que pretende superas el abandono de ese sector.

"Si logramos que de aquí salga una verdadera política agropecuaria, moderna, equitativa hacia el futuro, el paso que habremos dado para el desarrollo de este país sería fundamental", expresó el mandatario al inaugurar los trabajos del "Pacto nacional por el agro y el desarrollo rural".

Esta iniciativa del Gobierno surgió como respuesta a la huelga del sector agropecuario iniciada el 19 de agosto y que durante más de dos semanas mantuvo bloqueadas numerosas carreteras de Colombia, lo que aisló pueblos y ciudades en varias regiones y millonarias pérdidas económicas.

"Volver los ojos al campo, volcarnos hacia el campo donde está concentrada la pobreza, donde está concentrada la desigualdad, si logramos ahí ser efectivos este país cambia sustancialmente", manifestó el presidente.

Al acto acudieron también el vicepresidente Angelino Garzón, los ministros del Interior, Agricultura, Salud, Trabajo y Transporte, los presidentes de la Cámara y del Senado, varios gobernadores y alcaldes, representantes de los campesinos, de los indígenas y de diferentes sectores productivos.

El ministro de Agricultura, Rubén Darío Lizarralde, que asumió el miércoles el cargo, admitió que las recientes protestas campesinas y la solidaridad que despertaron en la ciudadanía son una llamada "justificada y legítima" al país para que reconozca "el atraso rural y la necesidad de superarlo".

Admitió que hay un desequilibrio en el bienestar y las condiciones de vida entre la población rural y la urbana "resultado de muchas décadas de políticas que no han dado prioridad ni a las necesidades del campo ni al desarrollo rural".

Agregó que en Colombia "las políticas agropecuarias no han logrado establecer condiciones apropiadas para el desarrollo de la productividad y la competitividad".

Según el Ministerio de Agricultura, en 2012 el 46,8 % de la población rural del país se encontraba en condiciones de pobreza, mientras que en el sector urbano ese índice era del 18,9 %.

En el acto, representantes de organizaciones campesinas destacaron el éxito de cooperativas creadas en diferentes regiones, mientras que otros criticaron la iniciativa del pacto agrario.

"Después de un paro absolutamente traumático no hemos recogido nada", dijo Héctor Centeno, representante de los campesinos del departamento de Boyacá, en referencia a la huelga en esa región, al tiempo que denunció que los acuerdos a los que llegaron con el Gobierno no se han cumplido.

Según Centeno, el grupo al que representa no participará en el pacto agrario porque lo que se está diseñando es una política agrícola del centro hacia las regiones cuando debería ser lo contrario.