Bruselas propone una normativa común sobre hipotecas en Europa

La Comisión Europea quiere estabilizar el sector hipotecario. Su objetivo es que los precios no se sobrecalienten y que se reduzcan los impagos y los embargos. Para ello ha propuesto establecer una normativa europea común que podría reducir los impagos hasta en 1.931 millones de euros, estima el organismo.

"Se necesita un paquete de medidas para garantizar el préstamo responsable en la Unión Europea. Esto minimizará los perjuicios a los consumidores, especialmente a los que tengan bajo nivel de cultura económica o bajos ingresos", dice un documento publicado por el ejecutivo comunitario.

La reflexión no puede ser más oportuna para el caso español, el día que concluye un mes de marzo negro en lo que al incremento de las hipotecas se refiere. Con el euríbor (el índice de referencia para la mayoría de los préstamos para la compra de vivienda) rozando el 2% de interés, la hipoteca media en España se encarecerá alrededor de 600 euros anuales.

Pero cuando la "irresponsabilidad" hipotecaria hizo más daño fue en los años anteriores a la crisis, según la Comisión, que considera que las concesiones excesivas de hipotecas, incluso a ciudadanos que no tenían capacidad económica para hacerles frente provocaron el sobrecalentamiento del sector. La propuesta de Bruselas exige que se mejore la transparencia y que la publicidad sea clara, de forma que el prestatario tenga informacion suficiente para elegir el producto que mejor se adapta a sus condiciones.

Para ello las entidades tendrían que entregar un formulario personalizado con las condiciones de la hipoteca al usuario, de forma que este pudiera compararlas con las de los competidores. Además, antes de conceder el préstamo, tendría que evaluarse la capacidad de pago de cada cliente e informarle detalladamente de la relación entre quien concede el préstamo y quien lo recibe.

Sobre ese punto la Comisión reconoce que el rechazo de la petición hipotecaria cuando la evaluación es negativa, puede reducir el acceso al crédito para sectores con bajos ingresos; sin embargo, considera que es preferible que cada cual se ajuste a sus posibilidades y ninguna familia sufra la "dramática" consecuencia de perder su hogar.

Otro aspecto clave de la normativa que propone Bruselas es la eliminación de barreras para fomentar la competencia entre entidades de distintos países. La intención es promover un mercado único hipotecario, sector que mueve cantidades equivalentes a la mitad de PIB europeo. A pesar de esas dimensiones, hasta ahora no hay ningún marco legislativo comunitario. La CE quiere revertir esta situación a través de una propuesta que ahora deberá ser discutida por el Consejo Europeo y por el Parlamento.