Metrovacesa logra liberar de embargo sus acciones de Gecina

Metrovacesa ha logrado que se levante el embargo que pesaba sobre parte de sus acciones en Gecina, en concreto sobre un paquete representativo del 9% del capital de esta empresa francesa.

La inmobiliaria española se liberó de este embargo en virtud de una resolución dictada por la Corte de Apelación de París que da la razón a Metrovacesa sobre un contencioso que mantenía en la capital gala sobre la compraventa de un edificio.

En virtud de este conflicto, un juez francés dictó el pasado mes de febrero el embargo de todas las acciones de Gecina en manos de Metrovacesa, equivalentes al 26,9% del capital de la patrimonialista gala.

En marzo, redujo el embargo al 9% atendiendo a una petición de la empresa española en la que indicaba que el valor del 26,9% de Gecina es muy superior al inmueble objeto del contencioso. Ahora, la Corte de Apelación de París libera todo embargo dado que, según anunció ayer Metrovacesa, ha estimado el recurso de apelación presentado por la empresa contra la sentencia que le obligaba a comprar un edificio en París por un importe de 90 millones de euros y ha declarado ilícita la causa de la promesa de compraventa.

De esta forma, la Corte de Apelación parisina anula esta causa de promesa de compraventa y obliga a la firma G2AM a devolver 15 millones de euros más intereses, previamente desembolsados en concepto de pagos anticipados y ejecución provisional. Asimismo, se liberan el referido embargo establecido como garantía para asegurar el pago del precio.

Esta sentencia es susceptible de recurso ante la Corte de Casación, aunque la decisión es "ejecutable de inmediato", añadió la inmobiliaria. Esa sentencia era fruto del contencioso que Metrovacesa mantenía con G2AM en relación con la compraventa del inmueble, ubicado en la Avenue Grande Armée de la capital francesa. La inmobiliaria española compró el edificio, pero tras firmar el contrato conoció circunstancias sobre el activo que le aconsejaron pedir la rescisión del mismo.

El vendedor del inmueble demandó a la compañía española y, en el marco del proceso judicial abierto, el juez encargado del caso ordenó un embargo temporal de los activos de Metrovacesa en Francia (su participación en Gecina).