Los beneficios de Adolfo Domínguez aumentaron un 46,43% en 2005

La empresa textil Adolfo Domínguez obtuvo en 2005 un beneficio neto de 20,13 millones de euros, lo que supone un incremento del 46,43% respecto a la cifra conseguida el año anterior, según ha informado el grupo textil gallego a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.

Las ventas de la compañía, presidida por el diseñador y fundador del mismo nombre, aumentaron un 20,46%, hasta alcanzar 152,3 millones de euros, debido al comportamiento positivo de todas las líneas de producto, especialmente la de mujer. El resultado bruto de explotación (EBITDA) también superó con creces la cifra del ejercicio anterior, situándose en 35,37 millones de euros, un 34% más que en 2004.

La expansión de la firma en el extranjero se concentra principalmente en Japón, donde ya han abierto ocho tiendas. Al cierre del ejercicio pasado, el grupo contaba con 332 puntos de venta, de los que 162 (107 en España y 55 en el exterior) eran propios, frente a los 142 de 2004.

El éxito de los resultados se debe, entre otros factores, al hecho de que el grupo continuó, durante 2005, explorando nuevas líneas de producto, entre ellas la de complementos, con 22 puntos de venta; la de tallas grandes (tres tiendas abiertas en el último trimestre) y la de niños. Asimismo, la compañía textil consiguió ser la adjudicataria del concurso de uniformes de la aerolínea española Iberia.

Según el grupo, el balance de 2005 presenta una sólida estructura financiera, como consecuencia de los resultados y de las políticas aplicadas en los últimos años, con unos recursos propios que representan el 75% de los activos totales y el fondo de maniobra incrementa el 4,82%. En cuanto a las previsiones para 2006, el grupo gallego pretende mantener el plan de aperturas de tiendas al mismo ritmo que en 2005. En el exterior, el plan de expansión se centrará en Japón y México, "sin descartar la posibilidad de abrir una tienda en París". Durante el presente ejercicio, Adolfo Domínguez iniciará su colaboración con El Corte Inglés, con la apertura paulatina de rincones en algunos de sus centros comerciales.