El gasto de consumo en EE UU creció un 0,8% en julio

El gasto de consumo de los hogares en Estados Unidos se elevó un 0,8% en julio con respecto al mes anterior aunque los ingresos disponibles se elevaron sólo una décima en el mismo periodo, el crecimiento más débil de los últimos dos años, según ha anunciado el Departamento de Comercio.

La subida de los gastos, debida principalmente a las fuertes ventas minoristas y de automóviles, supera en una décima a las previsiones de los analistas, mientras que el incremento de los ingresos es bastante inferior al 0,5% pronosticado por los expertos.

El Departamento revisó además a la baja el gasto de los hogares en junio hasta un crecimiento del 0,4% frente al 0,7% estimado inicialmente, aunque mantuvo en el 0,2% el incremento del poder adquisitivo de los hogares.

La ralentización de los ingresos en julio se debió principalmente a una caída de las transferencias de fondos procedentes del sector inmobiliario, principalmente de los alquileres.

Optimismo

Los analistas habían previsto que el consumo aumentaría un 0,7% y el ingreso un 0,5%, tras las fuertes ventas minoristas y de automóviles que indicaron que los consumidores superaron su renuncia al gasto de junio.

Según el Departamento de Comercio, se trata de una buena noticia para el crecimiento del tercer trimestre, tras la desaceleración de la expansión de la economía en el segundo trimestre. Sin incluir los efectos de la inflación y los impuestos, el ingreso disponible aumentó un 0,1%.

En una clara evidencia de que la inflación estadounidense está bajo control, tanto el índice de precios para compras del consumidor y los precios estructurales, una de las medidas favoritas de la Reserva Federal de la inflación, no mostraron cambios el mes pasado.

El gasto en bienes duraderos, que incluyen los bienes costosos como automóviles, creció un 4,1%, con lo que borró una caída modificada de 3,2% en junio. El gasto en bienes no duraderos avanzó un 0,2% y la caída previamente reportada de un 0,3% en junio fue modificada al alza, con un incremento de un 0,2%.

La recuperación en el gasto había sido presagiada tras la recuperación tanto en las ventas minoristas como de automóviles el mes pasado y los analistas prevén que esto sentará las bases para un mayor crecimiento en el segundo semestre del año después de que la economía pasara por un periodo débil en abril y junio.