IU propone que el Estado asuma los intereses de los créditos a empresas

El ovillo de subvenciones, desgravaciones y ayudas del Estado a las empresas, centrado en rebajar sus cotizaciones a la Seguridad Social, "ha fracasado" en el objetivo de crear empleo y, además, detrae recursos del organismo público. Por eso, IU va a presentar una proposición no de ley en el Congreso planteando que todas esas subvenciones -5.000 millones de euros en 2009- sean "reconvertidas" para que el Estado ayude a las empresas de otra manera: asumiendo el pago de los intereses de los préstamos bancarios que estas contraigan. Con una condición: que los créditos se pidan para programas de creación de empleo o de economía sostenible.

El borrador del plan -presentado ayer por el coordinador federal, Cayo Lara, y su responsable de Economía, José Antonio García Rubio-, recoge otras dos ideas habituales en IU: la nacionalización de las cajas de ahorros y la tasa sobre transacciones financieras.

Las cajas pasarían a configurar una banca pública volcada en dar créditos en pymes y familias y que tendría prohibido por ley operar desde y hacia paraísos fiscales y realizar operaciones de inversión. De la tasa sobre transacciones financieras quedaría exento el pago de nóminas, alquileres y recibos de suministros, "pero poco más". El resto de operaciones estaría gravado. "Un impuesto muy pequeño para quien hace una transacción en un cajero y muy importante para el que, desde el ordenador, hace cientos de transacciones de especulación", resumió el responsable de Economía.

"Les pido amparo"

García Rubio subrayó que el Gobierno lleva gastados ya 141.000 millones en ayudas a entidades financieras desde que empezó la crisis, sumando ayudas directas y avales. "Se nos dice que ese dinero se devuelve, pero ¿qué habría pasado si se hubiera usado para estimular la economía real?", planteó, antes de dirigirse a los periodistas: "Les pido amparo: en sus grabadoras y en sus cuadernos consta todo lo que nosotros llevamos mucho tiempo pidiendo y ahora otros defienden: banca pública, limitación de pagos en metálico, lucha contra el fraude, limitación de sueldos en los bancos...".

Cayo Lara aprovechó para pedir al presidente Mariano Rajoy que defienda dos cosas en Bruselas: someter a referéndum la reforma del Tratado de Lisboa y aplazar el compromiso de déficit del 4,4%. "Si no, el ajuste de los recortes será terrorífico en España", auguró.