"El Papa no viene a meter el dedo en el ojo", defiende la archidiócesis

La archidiócesis de Valencia presentó ayer el programa de actos que espera a los peregrinos que visiten Valencia antes de ir a Madrid a ver al Papa la semana que viene. El arzobispo Carlos Osoro celebró el encuentro y opinó que "esto sucede en un momento en que esta tierra necesita humanismo", asunto sobre el que insistió. Sobre el tono que emplee el Papa en su discurso, el delegado de juventud de la archidiócesis, Óscar Benavent, comentó: "Conociendo el espíritu del santo padre, no creo que meta el dedo en el ojo".

El encuentro que ha organizado la archidiócesis supone la llegada a Valencia de más de 12.000 simpatizantes católicos a partir de este jueves. Se repartirán por colegios y parroquias de media ciudad y algunos pueblos de la provincia como Xàtiva, Torrent, Alboraia o Alberic. Osoro señaló que este evento "ayudará a humanizar esta tierra". "El único interés es que nos encontremos todos con todos", añadió, "y que nos amemos los unos a los otros". Osoro calló la mayor parte del tiempo que duró la comparecencia de prensa, tiempo que aprovechó Benavent para detallar el encuentro. Respecto al discurso del Papa, tan solo añadió que "no se escuchará un discurso político, sino uno esperanzador y evangélico".

Con los miles de peregrinos que llegan a Valencia esta semana, la archidiócesis será la que más visitantes acoja con vistas a la Jornada Mundial de la Juventud, que se celebrará en Madrid entre el 18 y el 21 de agosto. Excepto Madrid, Valencia hospedará a más gente que cualquier otra archidiócesis.

En los días en que estén en la provincia, la masa católica disfrutará de misas matutinas en gran parte de las iglesias del centro de la ciudad, como la misma catedral o la iglesia de los Santos Juanes. Además, la Iglesia ha preparado una "capilla de la reconciliación" en San Juan del Hospital para que quien quiera vaya a confesarse, al estilo del paseo de los confesionarios que Madrid prepara en el Parque del Retiro. La archidiócesis ha programado también conciertos en la plaza de la Virgen, misas multitudinarias en varios idiomas, eucaristías, representaciones de teatro, exposiciones de pintura cristiana y rezos del rosario en la playa. Tanta actividad generará un impacto económico apreciable, aunque Benavent no se atrevió a dar cifras. "Esperamos ciertamente un impacto en la economía, sí", deslizó. "No obstante, son algo más de 10.000, no la masa del encuentro de las familias", que se celebró en Valencia en 2006.

En cuanto al número de valencianos que marcharán a Madrid, la archidiócesis calcula que llegarán a 5.800. Osoro indicó que a ello habría que sumar las visitas que se preparen de manera independiente. "Los Jesuitas preparan su viaje, los marianistas... Muchas órdenes y congregaciones que supondrán, al final, un número cercano a los 10.000 valencianos".