El autor del triple asesinato denunció a las víctimas por robo

El autor confeso del triple asesinato ocurrido el martes por la noche en la pedanía de Palomares, en Cuevas del Almanzora (Almería), había denunciado en 2008 a sus víctimas por robo de maquinaria y material de construcción en una de las obras que él promovía como constructor. Además, según informó ayer la Subdelegación del Gobierno en Almería, el detenido interpuso una nueva denuncia por amenazas el pasado día 21 en el cuartel de la Guardia Civil de Cuevas del Almanzora contra el cabeza de la familia, J. S. T., de 46 años.

Este vivía con su esposa, F. C. S. F., de 42 años, e hijo, C. S. S., de 25 años, en una casa en la barriada de Cabeza Martino, a la que el autor del crimen se acercó sobre las nueve de la noche armado con una escopeta que utilizó para acabar con la vida de los miembros de esta familia después de mantener una reyerta de la que también él salió herido.

Después de entregarse voluntariamente y confesar sus crímenes ante los agentes del instituto armado del puesto de Cuevas del Almanzora, tuvo que ser trasladado al Complejo Hospitalario de Torrecárdenas, en la capital, para ser atendido de las heridas que presentaba, fruto del forcejeo con sus víctimas. Ayer por la tarde fue dado de alta y trasladado a dependencias de la Guardia Civil para prestar declaración completa de los hechos que instruye el Juzgado de Instrucción número 3 de Vera.

Con motivo de este suceso, desde el martes por la noche se desplegó un dispositivo extraordinario de vigilancia tanto en las inmediaciones de la vivienda de la familia fallecida, como en la del autor del crimen. Este dispositivo se vio incrementado ayer tras la reunión que mantuvieron los integrantes de la Junta Local de Seguridad que, en sesión extraordinaria, acordó mantener un dispositivo especial durante varios días. Al menos, hasta la celebración de los sepelios que tendrá lugar esta tarde en Cuevas del Almanzora y como medida de "prevención" ante posibles actos de represalia que pudieran tomar familiares de los asesinados, de etnia gitana, contra parientes del autor confeso, que tiene esposa e hijos.

En el dispositivo "adecuado a las circunstancias, necesario y oportuno", como definió el subdelegado del Gobierno en Almería, Andrés Heras, participan agentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana, patrullas territoriales de Cuevas del Almanzora de la Guardia Civil y la Policía Local del municipio, además de agentes de la Policía Judicial de Garrucha y de la sección de homicidios de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Almería. Ni Subdelegación del Gobierno ni el Ayuntamiento de Cuevas del Almanzora ofrecen cifras exactas de los miembros que conforman el operativo para evitar dar la sensación de que el pueblo se encuentra en estado de sitio y ahuyentar, así, al turismo que, en verano, contribuye a duplicar la población de Palomares que pasa de 2.000 a 4.000 habitantes.