Menos consumo de alcohol y drogas, pero más precoz

Los jóvenes andaluces son cada vez más precoces a la hora de consumir drogas y alcohol. La edad media de inicio está en los 15 años. Así lo refleja el informe que presentó ayer en Sevilla la consejera para la Igualdad y Bienestar Social, Micaela Navarro, basado en una encuesta realizada entre 2009 y 2010 a 2.617 personas de entre 14 y 29 años.

Los datos que revela el estudio no son alentadores, pese a que las cifras del total de consumo son levemente inferiores (décimas) que las de 2002, año en que se publicó el anterior informe. La consejera afirmó que las cifras han bajado "algo", pero aconsejó "prudencia, y no bajar la guardia ni un minuto" ante este problema.

Aún así, lo más preocupante de la encuesta es el consumo precoz de drogas entre los jóvenes de la región. "No sé a qué se debe la bajada de edad. Probablemente nuestros jóvenes creen que estos hábitos les convierte en mayores, pero creo que intentan llegar a la edad adulta por el camino equivocado", explicó Navarro en la presentación del informe.

"Nuestros jóvenes intentan llegar a la edad adulta por el camino equivocado"

La edad de inicio de consumo es menor en las sustancias legales (tabaco y alcohol) que en las drogas ilegales. Los jóvenes empiezan a fumar tabaco poco después de cumplir los 15 años, y a beber alcohol antes de los 16.

La ingesta de alcohol es mayor en los varones, aunque el Navarro señaló que existe cierto pudor entre las mujeres en admitir su consumo. Los hombres también encabezan las cifras de consumidores de drogas ilegales, como la cocaína, el cannabis, el éxtasis o la heroína.

Pese a la ley que prohíbe la celebración del botellón desde 2006, el 10% de los jóvenes de entre 16 y 19 años admite que participa asiduamente en estas reuniones (todas o casi todas las semanas).

Micaela Navarro pidió responsabilidad a la hora de vender bebidas alcohólicas a menores, así como más control y colaboración ciudadana "si es posible, ya que la responsabilidad corresponde únicamente a los vendedores y a las familias", aunque afirmó que, en el sentido de concienciación, se había avanzado "muchísimo" en los últimos años.

Los jóvenes encuestados afirman ser conscientes de los riesgos de posible adicción y futuros problemas de salud por el consumo de drogas y tabaco: más del 96% de los entrevistados dice haber recibido información sobre la prevención de la drogodependencia, y el 85% de entre 14 y 18 años ha asistido, en sus escuelas o centros docentes, a actividades de información o prevención.

El 74,7% considera, sin embargo, que tomar cuatro o cinco copas el fin de semana no entraña ningún riesgo, lo que refleja la escasa conciencia social respecto a los peligros que puede tener el consumo habitual de alcohol. El número de bebedores habituales (consumo diario) aumenta con la edad, y el mayor porcentaje se da entre las personas de 25 a 29 años (3,1%).

Por su parte, más del 2% de los encuestados admitió haber probado la cocaína en el último mes. El consumo de esta droga, que ha disminuido un 0,6% respecto a 2002, alcanza su mayor cota en el grupo de edad de 20 a 24 años.

La consejería invertirá este año 44 millones de euros en campañas de prevención y atención a la drogodependencia en colegios, universidades y programas dirigidos a las familias, "porque aunque los padres no pueden estar desconfiando constantemente de los jóvenes si no tienen fundamentos, hay que seguir siendo muy estricto con este tema", subrayó la consejera. "Serán programas de prevención vivos, de acuerdo con cambios de hábitos".