Valderas acusa al presidente de "malgastar" la confianza electoral

Si Javier Arenas no dio ningún crédito a las nuevas propuestas planteadas por José Antonio Griñán en el debate de la comunidad, mucho menos aún le concedió el coordinador de Izquierda Unida, Diego Valderas.

De la boca del también portavoz de la federación salieron palabras muy duras contra el presidente andaluz, al que acusó de "malgastar la confianza" que la mitad del electorado depositó en el PSOE en las elecciones autonómicas de 2008. "Hemos asistido al fracaso del proyecto político del PSOE tras 30 años de gobierno ininterrumpido en Andalucía", proclamó.

Valderas acusó a Griñán de ser el responsable de la "metamorfosis" del PSOE renunciando a los principios de izquierdas, con recortes "profundos" a las conquistas sociales, con un enfrentamiento con el sector público, metiendo en el cajón promesas electorales como la ley de renta básica y, sobre todo, con el estallido de lo que llamó el "caso de corrupción más grave de la historia de Andalucía", en referencia al fraude en los expedientes de regulación de empleo (ERE).

"Haremos lo que sea para no tocar el Estado de bienestar", dice el socialista

El portavoz de IU consideró que la batería de propuestas presentadas por Griñán horas antes tienen una "música" que no le desagrada, pero dudó de que haya voluntad de ejecutarlas de manera inminente y se preguntó si no formarían parte del futuro programa electoral del PSOE. "Tiene que producir un giro de 180 grados, un cambio de rumbo en su política, si quiere frenar a la derecha andaluza", subrayó.

Griñán no buscó el cuerpo a cuerpo con quien dirige una formación que en un futuro le puede ayudar a permanecer en el Gobierno, pero si le afeó sus duros reproches. La etiqueta de neoliberal que colocó Valderas a sus políticas las renombró con el apellido de socialdemócratas. "Aquí no se ha retrocedido en ningún derecho", dijo de manera enfática Griñán, quien negó a Valderas el tener el patrimonio de la izquierda. "Esta comunidad, sin su ayuda, tiene más avances que ninguna otra en la que ustedes sí han estado en el Gobierno", aseguró Griñán. También le recordó a Valderas la oportunidad que dejó pasar IU en 1994 al negarse a entrar en el Ejecutivo andaluz cuando el Gobierno socialista se encontraba en minoría en el Parlamento y lo que está a punto de hacer IU en Extremadura al no pactar con el PSOE extremeño. "No hay dos orillas, señor Valderas, en unos sitios se suprimen prestaciones sociales y aquí no. Haremos lo que sea para no tocar el modelo de bienestar social", afirmó Griñán, quien exigió a Valderas más "pragmatismo y realismo y menos debate escolástico".

El presidente andaluz, como en su intervención inicial, mostró su profundo enfado con la respuesta que está dando Europa a la crisis financiera. Reiteró que no asistirá "impasible" a las presiones de los mercados que utilizan la crisis como "coartada para impugnar" el modelo del Estado de bienestar.

"No se es socialdemócrata porque se diga, sino por lo que se practica y lo que usted hace no es socialdemócrata", le contraatacó Valderas, para quien Griñán es "partícipe" del recorte de las conquistas de los trabajadores planteadas desde el Gobierno central del socialista José Luis Rodríguez Zapatero.

Para el izquierdista, el argumento de "las dos orillas" es "tremendamente antiguo y está incluso superado por la sociedad andaluza y española", por lo que el problema para él "está en la incoherencia de los que cambian de bando".

Según su opinión, mientras IU habla "del paro y de empresas cerradas" Griñán habla "de otra Andalucía", por lo que se ha planteado que ambos dirigentes no están en la misma acera. "Yo estoy en la del Defensor del Pueblo y usted en la de la patronal", zanjó Valderas.