La Cámara de Cuentas fija los pluses a reponer en Málaga en 110.000 euros

La Cámara de Cuentas de Andalucía ha fijado por encima de 110.000 euros la cantidad de dinero que deberían devolver el gerente de la empresa municipal Promálaga, José Estrada, y la directora del Palacio de Ferias y Congresos, Yolanda de Aguilar, si finalmente el Tribunal de Cuentas considera que existe responsabilidad contable por el cobro de pluses de productividad injustificados.

La cantidad se fijó ayer en la liquidación provisional realizada en la sede de la Cámara de Cuentas, una vez que en las diligencias previas se ha concluido que ambos directivos cobraron en 2006 y 2007 un total de 96.926 euros en concepto de productividad sin que estuvieran fijados y aceptados previamente unos objetivos y sin que exista constancia del órgano que cuantificó y autorizó el pago de estos premios. En la liquidación se grava esta cantidad con un recargo por los intereses generados, hasta sobrepasar en total los 110.000 euros.

A la práctica de la liquidación provisional asistieron el fiscal del Tribunal de Cuentas, que instó la apertura del procedimiento, y representantes legales los dos altos cargos, del alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y de la exconcejal Patricia Marín, que se ratificaron en las alegaciones ya realizadas en su momento. El Consistorio sostiene que los objetivos de los pluses de productividad estaban previamente determinados, y que en esos dos ejercicios, Promálaga solo cubrió el 68% y el 69%, por lo que su gerente percibió 21.628 euros, en tanto que el Palacio de Ferias si los alcanzó al 100% y su directora pudo percibir 75.658 euros. Todo ello añadido al salario, entre 154.000 y 162.000 euros.

En el mismo momento en el que se practicaba esta diligencia en Sevilla, el alcalde volvió a restar importancia al asunto en Málaga y se mostró seguro de que "no tendrá más recorrido". Una vez concluidas las actuaciones previas, el órgano fiscalizador andaluz las remitirá al Tribunal de Cuentas para que este decida finalmente si procede la apertura de un juicio por alcance contable, que podría concluir con una condena a los dos directivos a devolver al consistorio los pluses percibidos y los intereses correspondientes.

En plena polémica por este asunto, el alcalde aprovechó ayer para anunciar un nuevo recorte salarial "muy significativo" a los gerentes y altos cargos, que podría llegar hasta el 40% y el 50% para los que más cobran y citó expresamente a los responsables de Promálaga y Palacio de Ferias y Congresos, y a los de las empresas de transportes (EMT) y de limpieza (Limasa), que es mixta.

En 2010, De la Torre aplicó a 22 directivos y altos cargos una reducción salarial media del 20% y fijó como tope máximo salarial 145.000 euros anuales. En mayo de 2010, el alcalde se negó a aplicar a estos directivos el decreto de reducción de gasto público aprobado por el Gobierno y que supuso bajar el sueldo a los funcionarios. Adujo para ello un sentido de "humanidad, justicia y equidad para mantener el entusiasmo y la ilusión".

Ahora sin embargo parece decidido a meter la tijera a fondo, aunque introducirá partes variables, incentivos y pluses de productividad, "un acondicionamiento para conseguir objetivos", dijo. El alcalde pretende negociar con los afectados "para que no sea una imposición". "Deben entender que las circunstancias no son las de hace cuatro años", dijo.