A la caza del voto rural

El próximo 22 de mayo está en juego el gobierno de 771 ayuntamientos andaluces, pero el futuro mapa de poder local también tendrá una lectura que puede determinar las autonómicas y generales de 2012. Los principales partidos políticos son conscientes de ello y, por eso, han intensificado sus esfuerzos en la conquista del medio rural, que concentra el 90% del territorio de la comunidad y donde vive más de un 50% de la población.

"Teniendo en cuenta que 700 municipios andaluces tienen menos de 40.000 habitantes, el medio rural es determinante y fundamental para nosotros", admitió ayer Gaspar Zarrías, número cuatro del PSOE federal y presidente de los socialistas de Jaén. Los socialistas gobiernan actualmente en municipios que representan el 51,94% de la población andaluza, y el PP lo hace sobre el 31,48%. Sin embargo, el reparto de fuerzas es muy desigual. Si se tiene en cuenta el voto en las ciudades mayores de 50.000 habitantes (solo 28 en Andalucía), el PP tiene un poder del 42,74%, frente al 36,5% del PSOE y el 9,4% de IU. Ahora bien, si se invierte la pirámide y se analiza el comportamiento en los municipios menores de 20.000 habitantes, la hegemonía socialista queda de manifiesto, con el 45,62%, frente al 23,7% de los populares y el 19,84% de IU.

Los partidos buscan ampliar su espectro electoral en el campo andaluz

Expoliva, la feria del aceite que se celebra hasta hoy sábado en Jaén, se ha convertido en pasarela de los principales dirigentes políticos en busca de rentabilizar el desencanto que vive el campo andaluz. Zarrías coincidió ayer en este lugar con Javier Arenas. El presidente de los populares andaluces admitió que el medio rural le quita el sueño a su partido. "Tenemos una asignatura pendiente", dijo, para proclamar a continuación: "Confiamos en los vientos de cambio en el interior".

Si en la inauguración de Expoliva fue José Antonio Griñán el que trajo en forma de regalo una línea de créditos a los olivareros para que éstos no se vean obligados a malvender su aceite, ayer fue Arenas el que dijo que "hay que mimar" al sector por ser la punta de lanza de las exportaciones andaluzas. Eso sí, lo hizo con propuestas que escapan al ámbito andaluz como la recuperación del Ministerio de Agricultura o dar la batalla en Bruselas para la futura PAC.

Muy cerca de Expoliva, en Torredelcampo y en Martos, comarcas olivareras por excelencia, el coordinador andaluz de IU, Diego Valderas, también se apuntó a la defensa del medio rural. Reivindicó el peso estratégico del campo andaluz. "Andalucía sin agricultura no existe", dijo, y equiparó la importancia del olivar con la que tiene el río Guadalquivir para la vertebración de la comunidad. Pero ningún partido lanzó propuestas milagrosas para el campo andaluz. Tan sólo en Andalucía, en los últimos tres años se han cerrado más de 12.000 explotaciones, y apenas el 4,5% de los agricultores (uno de cada 20) tiene menos de 35 años.

Ni siquiera en la ley del Olivar, primera norma de rango autonómico que se aprueba para un cultivo específico, cuenta con el consenso de los grupos políticos. PP e IU acaparan la mayoría de las enmiendas presentadas al texto. Los populares han registrado 116, pero la principal, dijo Arenas, es que esta ley se dote con financiación pública. Los populares han apelado a la figura de la ex ministra Loyola de Palacio, ya fallecida, para hacer bandera de su apuesta por el olivar. El candidato en Jaén, José Enrique Fernández de Moya, anunció ayer las becas de investigación que llevarán el nombre de la ministra que tuvo que negociar la anterior reforma de la OCM del aceite.

Aunque la agricultura centró el argumento electoral de la jornada, hubo tiempo para sacar los temas que están marcando la campaña, como los ERE.