La Xunta admite que se hagan actos de partido durante viajes oficiales
El presidente solo volará en primera clase en trayectos transoceánicos
Ninguna normativa regula los viajes al extranjero que hacen los representantes de la Xunta, pero desde ayer el Ejecutivo gallego tiene un código ético al que atenerse. Por petición del Parlamento, la Consellería de Presidencia ha elaborado una guía para regular esos viajes, sobre todo en periodo preelectoral. El código censura la falta de transparencia, el gasto innecesario y los vuelos cortos en primera clase. Sin embargo, no desaprueba que los políticos realicen actos de partido en medio de un viaje institucional pagado con dinero público. "En la configuración de las agendas de los viajes al exterior, se aplicará una nítida separación y diferenciación entre la actividad institucional propiamente dicha y aquella que pudiera tener lugar en virtud de la pertenencia a un partido político y fuera organizada por éste", recoge el texto.
Para el PSdeG, el código es ambiguo y tiene "demasiadas excepciones"
Para los periodos preelectorales, el texto sí diferencia estas dos actividades: todos los encuentros con la colectividad gallega en el exterior se harán como miembros de un partido y será su formación la que "financie íntegramente los costes del viaje".
Desde la convocatoria de elecciones en las que puedan votar residentes en el exterior (todas menos las municipales) hasta la celebración de los comicios, la norma especifica los casos en que se pueden realizar viajes al extranjero. Sería ético hacerlos si el presidente de la Xunta, o en quien delegue, visita a un mandatario extranjero o presidente de instituciones europeas; en caso de "misiones con marcado carácter económico y comercial"; citas relevantes del calendario político internacional; reuniones en las que haya responsabilidades de representación o por catástrofes naturales o situaciones excepcionales. La Xunta tampoco podrá financiar u organizar actos que aludan a logros del Gobierno ni realizar inauguraciones de obras.
Para el PSdeG, el código ético contiene una "calculada ambigüedad" con "demasiadas excepciones a la norma" en los viajes en periodos electorales. El diputado José Manuel Lage consideró que el texto es "un paso adelante, pero insuficiente". Así, insta a la Xunta a cumplir con la moción aprobada por los tres partidos en el Parlamento, que "prohibía el contacto con los residentes ausentes en los tres meses previos a las elecciones".
El conselleiro de Presidencia, Alfonso Rueda, defendió ayer, frente a las críticas del BNG, que el presidente de la Xunta "se costeó a título particular" el viaje de vacaciones que disfruta esta semana en Brasil. "Parece que la oposición tiene la conciencia sucia", sugirió.
El código pone coto también a los vuelos en primera clase, que solo podrán disfrutar dos miembros del Gobierno en cada viaje si este es trasoceánico o de largo recorrido. Los vuelos nacionales o con destino a otro país de la Unión Europea se harán siempre en líneas regulares y en clase turista. Además, el presidente deberá comparecer al menos en una ocasión en cada periodo de sesiones para informar sobre los viajes.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.