Los municipios guipuzcoanos recibirán por tercer año menos dinero foral

El responsable de la Hacienda guipuzcoana, el diputado Pello González, echó ayer otro jarro de agua fría sobre las maltrechas arcas locales de este territorio. Por tercer año consecutivo, los Ayuntamientos van a percibir una candidad del Fondo Foral de Financiación Municipal (FFFM) inferior a la inicialmente prevista. Esta vez podrían tener que restituir unos 10 millones de euros en total sobre la liquidación que ya les practicó la Diputación. González atribuyó esta rebaja al empeoramiento de la recaudación tributaria en los últimos meses de este año y la imposibilidad de alcanzar los objetivos asumidos en octubre pasado en el seno del Consejo Vasco de Finanzas. Esta contracción recaudatoria también tendrá un efecto negativo para las arcas forales, dado que los recursos propios de la Diputación se verán mermados en unos 13 millones.

Los ingresos fiscales cayeron en noviembre pasado un 6,1% respecto al mismo mes del año anterior, principalmente por la caída del IVA, según explicó González en un encuentro con periodistas. No obstante, añadió que la recaudación líquida durante los 11 primeros meses de este ejercicio se incrementa un 6,8%, un aumento soportado en gran medida por el buen comportamiento que ha tenido el IRPF. El descenso registrado en noviembre rompe una tendencia de subidas ininterrumpida desde marzo.

Esta evolución, sin embargo, no será suficiente para cumplir los compromisos asumidos con el resto de las haciendas forales para el cierre del año, lo que tendrá una incidencia directa y negativa para los consistorios. González explicó que Guipúzcoa se ha visto perjudicada por el tirón recaudatorio registrado en Vizcaya y Álava. Estas haciendas han ingresado estos últimos meses 50 millones por la ampliación de capital del BBVA y 40 millones por el cierre de Sidenor, respectivamente.

Además, el diputado guipuzcoano advirtió de que los Ayuntamientos no podrán acogerse esta vez a aplazamientos para devolver los 10 millones del desfase, como ha ocurrido en los dos ejercicios anteriores. En 2008, el saldo negativo fue de 54 millones y el año pasado se elevó a 98 millones, aunque la Diputación concedió a los municipios la posibilidad de reintegrar esas cantidades en dos años.

Los Ayuntamientos, que soportan cerca del 50% de su presupuestos en la financiación foral, no contaban con esta mala noticia, que no hace sino agravar la delicada situación por la que atraviesan. Las entidades locales de Guipúzcoa acumula en estos momentos una deuda viva de 472 millones, según informó González, quien quiso precisar que se trata de una cifra "sostenible". Aunque la próxima semana dará a conocer con detalle un estudio sobre la solvencia financiera de los municipios, el titular del fisco guipuzcoano adelantó que, si en 2009 había 11 Ayuntamientos con la "luz roja de alarma" encendida por registrar un ahorro negativo, este año se ha sumado "alguno más". No obstante, quiso precisar que la actuación general de los responsables municipales es de "responsabilidad".

González también aludió a las "decisiones muy importantes" que deberán adoptarse el próximo año, a la vuelta de las elecciones forales y municipales, en materia tributaria en el País Vasco.

Se refirió a la necesidad de debatir sobre el índice de imputación del 6,24% que la Ley Quinquenal del Cupo asigna a la comunidad autónoma o modificar la ley de Aportaciones para rebajar la cuota del 70% de los ingresos de las Diputaciones que en la actualidad se destinan al Gobierno vasco. En este sentido, abogó por impulsar "cambios sosegados" y buscar "amplios consensos" con una "visión general de país".