Eusko Alkartasuna reclama al PNV "un ejercicio de responsabilidad" en Álava

La planificación de toda ruptura de una alianza política tiene una prioridad: que el ex socio quede públicamente como culpable. En esa fase se sitúa ya EA, cuyo secretario general, Pello Urizar, quien el viernes anunció que su formación votará en contra de los presupuestos alaveses, pese a estar en el Gobierno foral, si no hay una reforma fiscal, se ratificó ayer en esa postura. Sin embargo, al mismo tiempo instó al PNV a realizar "un ejercicio de responsabilidad". "Todavía estamos dispuestos a hablar", dijo en una comparecencia durante la asamblea nacional de EA en Vitoria. Urizar reclamó "lealtad entre socios de Gobierno" para volcar sobre el otro la responsabilidad: "Si el PNV no tiene voluntad, será cosa suya, pero no de EA", recalcó.

EA ha casi finiquitado su participación en el Gobierno foral al plantear una condición inasumible para los peneuvistas: una reforma fiscal con efecto en 2011. El diputado general, Xabier Agirre, ya avisó anteayer de que su aún socio estaría facilitando "el papel y la tinta" con que destituirá a los dos diputados forales de ese partido si se mantienen en sus trece.

EA llamará al PNV, pero antes lo acusa de esconder "un acuerdo previo con el PSE". Los socialistas "no son solo sus socios preferentes en Alava, sino que los jeltzales están permitiendo medidas tan injustas como la congelación de pensiones o la reforma laboral", abundó Urizar. "Estos acuerdos son a escondidas y no dejan claro hasta dónde llegan", añadió.

Urizar rechazó que su partido use la cuestión fiscal como excusa para salir del Gobierno foral por la cercanía de las elecciones y la exigencia de su nueva alianza con Batasuna. La imputación por corrupción de "diputados forales" del PNV, señaló en referencia al caso De Miguel, hubiese supuesto la ocasión perfecta para dejar el Gobierno provincial, pero EA no dejó entonces a su socio "a los pies de los caballos" ni a merced de la censura del PP, concluyó.