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El rector integra en la universidad virtual su centro contra la violencia

Personal del Centro Reina Sofía ocupa puestos de gestión en la VIU

El rector de la universidad virtual creada por el Consell, la Universidad Internacional Valenciana (VIU), José Sanmartín Esplugues, dejó de ser director del Centro Reina Sofía, Fundación de la Comunidad Valenciana para el Estudio de la Violencia, a finales del pasado mes de febrero, pero pasó a ser director del primer instituto de investigación de la VIU, el Instituto Centro Reina Sofía, que se creó a continuación. Personal del centro de estudios sobre la violencia forma parte del "instituto mixto" creado por Sanmartín dentro de la universidad de la que es rector y en muchos casos ocupa también puestos de gestión en esa universidad virtual, financiada con fondos públicos pero de carácter privado. Sin embargo, el Centro Reina Sofía propiamente dicho todavía sigue existiendo como fundación de la Generalitat.

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La situación hace que Sanmartín pueda participar en unas actividades como rector de la VIU y en otras como director del Instituto Centro Reina Sofía. Más confuso es todavía el papel de una parte del profesorado y de los responsables de la VIU, que figuran en las tres entidades. El pasado mes de junio, por ejemplo, se celebró en la sede de la Fundación Bancaja, en Valencia, un curso de especialización titulado Terapia breve: Maltrato infantil y familia, que organizaba el Centro Reina Sofía (no el instituto mixto sino la fundación originaria), cuyo coordinador era el propio Sanmartín y en el que intervenían dos profesoras de la VIU, Isabel Iborra y Ana Rodríguez, en tanto que coordinadoras de sendas áreas del Centro Reina Sofía. El curso, publicitado con los logotipos del Centro Reina Sofía, la VIU y el Instituto Centro Reina Sofía, como entidades diferentes, contaba también con la participación de Ángela Serrano como responsable del área de maltrato infantil del Centro Reina Sofía y a la vez jefa de Relaciones Internacionales de la VIU.La dinámica, anunciada en su día por el Consell dentro de un tímido recorte de fundaciones y organismo autónomos, consiste en integrar el Centro Reina Sofía en la VIU, pero todo el mecanismo es tan opaco y confuso como el funcionamiento de ambas entidades (la cuentas de la VIU no han podido auditarse porque son las mismas de la fundación que impulsó su creación). La diputada socialista en las Cortes Valencianas Ana Noguera ha reclamado reiteradamente información sobre esas entidades y las responsabilidades de Sanmartín en ellas. También ha advertido sobre la posibilidad de que estuviera cobrando de ambas fundaciones.

La administradora de la VIU certificaba el pasado mes de junio que Sanmartín cobra su salario y complementos como catedrático de la Universitat de València y que "no ha percibido nunca cantidad alguna en concepto de complemento de cargo como rector, dietas ni honorarios por su participación en actividades docentes de la Universidad Internacional Valenciana". A su vez, la subdirectora de la Fundación de la Comunidad Valenciana para el Estudio de la Violencia Centro Reina Sofía certificó que Sanmartín "no ha percibido ninguna retribución de la fundación en 2010".

Sin embargo, no ha sido siempre así, ya que la misma Sindicatura de Comptes, en su fiscalización de 2008, señalaba, entre otras irregularidades del Centro Reina Sofía en la contabilidad de "otros gastos de explotación" (que ascendían al 51% de los gastos registrados): "El director de la Fundación ha recibido 13.900 euros mediante anticipos a cuenta, por servicios de coordinación/asesoramiento de varios cursos. Este importe no está contemplado en cuanto al objeto de la actividad y la cuantía en el acuerdo que aprobó el patronato en su reunión del 24 de enero de 2008".

Noguera prepara una iniciativa parlamentaria para aclarar la situación en que se encuentra el Centro Reina Sofía en relación con la VIU y con el nuevo instituto del mismo nombre creado dentro de la universidad virtual. Se trata de organismos que dependen de las aportaciones de la Generalitat y que han estado dirigidos por la misma persona, lo que no ha impedido que establecieran convenios de colaboración. Por ejemplo, en los ejecicios de 2008 y 2009, la Fundación Universidad Internacional de Valencia estableció con el Centro Reina Sofía un convenio para actividades formativas y de investigación cuyo importe era de 50.000 euros. La página web del Centro Reina Sofía ofrece vínculos a un máster sobre problemas de conducta en el aula y a cursos que remiten a actividades organizadas por la VIU. Esta universidad virtual, basada en Internet y tecnologías audiovisuales, tiene un presupuesto de 4,5 millones de euros.

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