José Luis Méndez entra en el consejo de Reganosa

José Luis Méndez López, ex director general de Caixa Galicia y actual presidente de su fundación, se sentará a partir de ahora en el consejo de administración de Reganosa. La designación se produjo en la junta de accionistas celebrada ayer, donde el grupo Tojeiro y la Xunta hicieron valer su nueva mayoría, traducida en el nombramiento de 11 de los 20 consejeros. Como caras nuevas, el grupo Tojeiro incorpora, además de a Méndez, a Marcos López y Ferhat Zumrutbag, ambos directivos de la planta de gas, y a Roberto Tojeiro Peleteiro, que accede en sustitución de su abuelo, Roberto Tojeiro Díaz, presidente de honor de la compañía. Los accionistas agradecieron la labor desempeñada por Tojeiro Díaz, que abandona el cargo por motivos de edad, tras reconocer que "sin su perseverancia", el proyecto de la regasificadora "habría sido irrealizable".

Este podría ser el penúltimo movimiento de acciones en Reganosa este año, ya que las cajas siguen con las suyas a la venta (suman, entre Caixa Galicia y Caixanova, el 15%). El fondo de pensiones australiano Commonwealth Bank, que este verano articuló una operación para hacerse con el control de la compañía, podría contentarse con una pequeña participación, según fuentes financieras, aunque tiene todavía todo el mes para tomar una decisión. Las mismas fuentes creen que el capital extranjero no tiene un "interés especulativo", sino que busca "una inversión que le garantice una rentabilidad estable". Por parte de la Xunta entran en el máximo órgano de la regasificadora Rosa Pedrosa, secretaria general de la Consellería de Facenda, y el ingeniero Manuel Lara, que hasta 1996 fue director de Gestión Energética de Galicia, germen de lo que hoy es el Inega.

También ayer, el Comité Cidadán da Ría de Ferrol criticó que la Xunta haya ampliado su capital en Reganosa cuando esta acumula dos sentencias en contra de la tramitación ambiental de su emplazamiento y tiene abiertas al menos ocho causas. Esas y otras cuestiones, dicen, comprometen el futuro de la planta. Sin embargo, la empresa cree que, aun en el caso de que alguna de las acciones en su contra tenga éxito, "su impacto en el negocio sería remoto", por lo que en las cuentas de los últimos dos ejercicios no consignó partidas presupuestarias por posibles quebrantos.

La junta se celebró el mismo día en que el comité de peticiones del Parlamento Europeo trataba una demanda de Esquerda Unida contra la instalación de la planta de Mugardos. Su resolución se dará hoy a conocer.