"No está a la altura de la NBA"

No fue una noche cualquiera. Así que, al final, la celebración fue de gran calibre. Tal vez para los jugadores de los Lakers el partido fuera solo amistoso, el segundo de su pretemporada. Pero para los del Barça, evidentemente, no. De ahí, su alegría por el triunfo. Navarro, Sada o Rubio intentaron ser comedidos, conscientes de que su rival no había estado a su altura habitual. Sin embargo, ninguno obvió que habían ganado al campeón de la NBA, al mejor equipo del mundo. A un adversario al que, cuando saltó a la pista, el público ovacionó. Pero, con el duelo avanzado, los estadounidenses mostraron dureza. Por eso varias veces se escuchó "¡fuera!" ante acciones poco comunes en Europa.

"Sí, podremos decir que estábamos ahí", resaltó Grimau; "nos preguntamos si queríamos ganar o, simplemente, jugar. Decidimos que queríamos ganar y todo nos salió bien. Son los campeones de la NBA y en muchos momentos han jugado al nivel de su competición. Eso da aún más valor a la victoria".

Sin embargo, Xavi Pascual, el entrenador del Barça, evitó entrar en tales valoraciones. "Hemos hecho historia, sin duda", dijo, "pero solo eso. Era un amistoso y ellos están al principio de su preparación. Claro que nosotros estamos en proceso de mejora y hoy también anduvimos por debajo de nuestro nivel. En cualquier caso, el triunfo nos llena de satisfacción y orgullo".

"El Barça demostró ser un buen equipo. Es favorito para muchos títulos y espero que los gane", comentó Gasol. "¿La sensación? Me gusta ganar y hemos competido para imponernos, pero estamos muy verdes. Nos queda mucho trabajo. Contamos con otras dos semanas de preparación y vamos a aprovecharlas. El partido ha sido emocionante. Ha habido buen ambiente y me gusta ver a los amigos ganar y hacer vibrar a la gente", añadió.

El jarro de agua fría lo recibieron los azulgrana por parte de Phil Jackson, el técnico de los Lakers, que respondió de forma contundente a la pregunta de si el Barça está al nivel de la NBA. "No", dijo muy seco; "jugó muy bien, pero no está al nivel de nuestra competición ni preparado para disputar tantos partidos jugando cada día. Le falta capacidad física. Sabíamos que iba a jugar con mucha determinación y que se centraría en Pau. Perdimos muchos balones y fallamos bastante. Bryant no está a su altura. Ni siquiera estaba previsto que jugase el último periodo, pero me pidió hacerlo".