El Consell duda de la validez del último sondeo del CIS

Paula Sánchez de León, portavoz del Consell, sembró dudas ayer sobre el último barómetro autonómico del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) para evitar responder al contenido de un sondeo que revela cómo el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, inspira "poca confianza" al 32,6% de los valencianos mientras que al 29,3% no le inspira "ninguna confianza".

La portavoz del Consell dijo: "Cualquier sociólogo y cualquier persona puede entender que la validez que pueda tener este barómetro [cuyo trabajo de campo se desarrolló entre enero y marzo de 2010] con tantos meses de antelación es cuestionable. Piensen o reflexionen por qué se hace público ahora. Lo que habría que plantearse es por qué el CIS hace públicos estos datos justo cuando acaba el Debate sobre el Estado de la Nación, cuando [el presidente del Gobierno José Luis Rodríguez] Zapatero sale como claro perdedor y derrotado", deslizó Sánchez de León. "Era necesario buscar algo para tapar los desastrosos resultados del debate", añadió.

Confianza

Jorge Alarte, secretario general de los socialistas valencianos, no hizo mención expresa a la encuesta del CIS, pero aprovechó la apertura de la Escola de Estiu de los socialistas valencianos en L'Eliana para decir: "Tenemos que ser capaces desde la acción política y electoral de informar, compartir, generar complicidades y adhesiones a un modelo que sustituya al ya agotado de Camps y el PP de los últimos 15 años. El PP de la Comunidad Valenciana ya no goza de capacidad, confianza, eficiencia, honorabilidad y capacidad de generar grandes consensos".

Enric Morera, portavoz de Compromís en las Cortes Valencianas, comentó: "La encuesta del CIS es preocupante. La mitad de los valencianos no confían en el presidente, ven nuestro país como un país de corruptos y un número importante de encuestados califican como regular la gestión de un presidente que consideran poco eficaz y poco honrado".

Marga Sanz, coordinadora general de Esquerra Unida, comentó: "La encuesta del CIS no hace sino confirmar lo que ya sabíamos, la decrepitud y la pérdida de credibilidad de Camps. Lo más grave de todo es que el presidente es considerado una persona poco honrada. Frente a eso, nos sigue preocupando que Camps actúa como si nada fuera con él".